Si hay algo que satisface a un veterano bolsista es ver cómo llega el reconocimiento a un valor por su trayectoria de largo plazo y en este caso se trata de Viscofan y su entrada en el selectivo español. Esta empresa no ha estado de moda y por ello le doy más importancia. En los años 90 era un valor reconocido pero una vez que empezaron los pelotazos de las punto.com y su posterior caída en que solo se recomendaban valores por su tamaño y no por su calidad, Viscofan perdió brillo hasta que su valor no podía ocultarse por más tiempo.
Perfil de la empresa. Es el líder mundial en este mercado, con una gran diversificación geográfica, tecnológica única en el mercado con productos de mucha calidad. Viscofan, comercializa sus productos en más de 100 países. A través del grupo IAN está presente en el mercado de alimentación vegetal. El Grupo IAN, a través de la marca Carretilla, es uno de los líderes del mercado español.
Por todo este buen hacer durante muchos años se ha convertido en una gran inversión a largo plazo que ha visto recompensado este trabajo con una gran rentabilidad a pesar de ser un desconocido para muchos inversores e incluso haber sido considerado como chicharro en estos años.
Los chicharros son Valores de baja capitalización, muy volátiles y de escasa liquidez debido a la baja estabilidad económico-financiera de quienes los emiten. Pero no es el caso de Viscofan ya que cuenta con una capitalización cercana a los 2.000 millones, superior a BME, Indra, Bankinter, FCC, y próxima a Técnicas Reunidas, Telecinco y Acerinox todas ellas empresas clásicas del Ibex.
Otras características es que son títulos muy volátiles y estrechos, deshacernos de ellos puede ser un problema, valores con poca rotación, estrechos, con bajos precios, pertenecientes a sociedades con una situación financiera delicada o de riesgo elevado; cómo podemos ver ninguna de estas características vemos en Viscofan.
En cambio de Viscofan sabemos que es uno de los pocos valores que ha sorteado bien la crisis En sus 22 años de vida bursátil sólo ha cerrado seis ejercicios con pérdidas; desde que comenzó la crisis en 2008, el valor ha tenido una gran evolución, en 2009 un repunte del 26% y 2010 con un alza del 59%. En lo que va de 2012, el valor ha ganado más de un 40 %
Entre las cosas que no han atraído de Viscofan es su PER (sobre 17 veces) y su escasa rentabilidad por dividendo (sobre un 2,40 %) Datos que hemos comentado otras veces, ese PER es porque los conocedores del valor pagaban más porque por sus excelentes expectativas que se cumplían cada año; y su baja rentabilidad por dividendo era debido a que la empresa utilizaba estos beneficios para seguir creciendo que con una rentabilidad superior al 20 % de sus recursos propios y basándose en el interés compuesto la empresa ha llegado a acceder al Ibex 35.
Nos pasan muchas oportunidades de inversión y algunas no sabemos verlas por eso voy a poner una divertida historia que ilustra las limitaciones del pensamiento y refleja nuestra incapacidad de reconocer las oportunidades que se nos presentan.
El párroco estaba sentado a la mesa de su cocina una tarde, trabajando en su sermón para el domingo siguiente. Llevaba varios días lloviendo a cántaros y la presa que había subiendo el rio desde el pueblo había cedido hasta inundar la ciudad de manera que todos los parroquianos empezaron a huir de sus hogares. El párroco miro por la ventana y vio que las aguas subían hasta el borde de su alféizar. Vio gente nadando en la crecida, remando en barcas y agarrándose a cualquier objeto flotante que agarraran. En ese preciso instante dos personas pasaron remando por delante de su ventana. –Padre, salte a la barca con nosotros y lo pondremos a salvo. El cura les indicó con un gesto que siguieran adelante. No, gracias. No me pasará nada. Vosotros seguid y cuidaos. Padre, le imploraron, venga con nosotros, haga el favor. No es seguro quedarse aquí. No, dijo el cura. Marchaos, estaré bien. Bueno, usted verá dijeron ellos y se marcharon. Cuando el nivel del agua siguió subiendo, el párroco recogió sus papeles y subió a su estudio del piso de arriba. El nivel del agua siguió subiendo amenazadoramente. Cuando miró por la ventana, varias personas se acercaron en una gran barca de remos. Padre, suba a la barca con nosotros, le pondremos a salvo. Todavía muy tranquilo, el párroco dijo: no, hijos míos. Dios velará por mí. Vosotros seguid adelante y salvaos; no me pasará nada. No hizo caso de todas sus súplicas, de modo que renunciaron y se alejaron remando. Las aguas siguieron subiendo hasta el punto que tuvo que encaramarse al tejado. Allí estaba, agarrado a la veleta, cuando se acercó un tercer bote. Padre, tiene que venir con nosotros. Es una situación muy peligrosa, suba a la barca con nosotros. Con gran calma les indicó que siguieran adelante. No me pasará nada. Tengo mi fe en nuestro Señor. El me salvará de la inundación. Viendo la negación del párroco se alejaron. Por desgracia la estrategia del párroco no funcionó. Se ahogó y lo siguiente que supo es que estaba ante las puertas del Paraíso. San Pedro lo vio y le dio una voz ¡hombre, aquí estás! El cura asombrado y confuso Dijo ¿Qué ha pasado? ¿Por qué no me ha salvado Dios de la inundación? He llevado una vida virtuosa, he consagrado toda mi vida al servicio de la iglesia. Penaba que Dios me salvaría. San Pedo se encogió de hombros y dijo ¿Qué querías? Mandamos tres botes a por ti.
Cuando el párroco está obsesionado por una solución celestial no está ocupándose sino preocupándose.
Hay muchas oportunidades y opciones que nos presenta la vida, a veces nos llegan muchos “botes” que no sabemos ver o no sabemos aprovechar. Hay que olvidarse del contenido de ese mensaje que la solución es celestial, de esa cantidad de datos y cifras, ideas, opiniones etc. Hay que centrar la atención en el “proceso” el modo de intentar llegar a la solución. Entender la diferencia entre contenido y proceso es una de las formas más sencillas de llegar a conclusiones a través del sentido común. A veces nos dejamos llevar por la gran cantidad de información que nos va llegando y toda la vemos buena o mala. En el proceso, en la evolución del problema es donde a veces nos llegan “botes” y los dejamos pasar esperando soluciones celestiales. Se trata de ver por encima de los patrones mentales. Se ha de tener capacidad de detectar y rehuir las fronteras inconscientes que imponen nuestras percepciones de un problema. El filósofo y matemático británico Alfred North Whitehead supuestamente dijo: Hace falta una mente muy inusual para abordar el análisis de lo obvio.
La exposición de Viscofan es solo para explicar cómo pasan las oportunidades no como recomendación de valor, porque aunque sigue siendo una gran empresa, ahora los fondos que replican el índice han hecho las compras y el negocio bueno ya está hecho.