Imaginemos que encontramos a alguien que nos propone una apuesta, una apuesta tan simple y cotidiana como lanzar una moneda al aire, tan sólo debemos elegir cara o cruz. Como somos reacios a apostar y para motivarnos "a jugar" esa persona nos ofrece lo siguiente: Él pondrá en cada apuesta 60€ y nosotros debemos poner 40€, y podremos jugar con él tantas veces como queramos, él siempre estará disponible. Lanzar una moneda al aire como hasta un niño sabe es un 50% de probabilidades, en cada apuesta que hagamos con esa astuta persona tenemos 100€ de premio, pero de esos 100€ nosotros hemos puesto 40€, es decir el 40%, y él habrá puesto 60€ (60%).
Aceptamos por fin y comenzamos a jugar, en la primera operación apostamos a que saldrá cruz pero el azar nos juega una mala pasada y sale cara. ¿Acabamos de perder 40€? ¿Hemos perdido?. Teóricamente hemos perdido 40€ pero realmente hemos ganado dinero en esa apuesta. ¿Cómo es eso posible? Tenemos un 50% de acertar pero ponemos un 40% del premio total, por lo tanto es una operación con expectativa positiva. A la larga ganaremos dinero, es más, cuantas más veces juguemos mejor, aunque "perdamos". Tomando bloques de 10 apuestas tenemos que teóricamente ganaremos 5 veces y perderemos otras 5, ya que ese es el porcentaje de acertar una moneda al aire. Pero en las 5 veces que ganemos ganaremos limpios 60€x5=300€ y en las 5 veces que no acertemos perderemos 40€x5=200€, por lo que de cada 10 operaciones/apuestas ganaremos 300-200=100€, o lo que es lo mismo ganaremos 10 € por apuesta. ¿Hemos perdido realmente 40€ en esa primera apuesta que nos salío mal? ¿o hemos ganado "10 euros"?. Claro, acabamos de perder 40€ y es difícil ver que en esa operación realmente hemos ganado. ¡Pero cómo voy a ganar si acabo de soltar 40 eurazos!, pues sí, hemos ganado, haría esa apuesta una y mil veces. Habrá veces en que apostaré que saldrá cara y durante 8 veces seguidas saldrá cruz, y a la novena vez seguiremos teniendo un 50% de acertar, es un error muy común pensar que si durante 8 veces seguidas sale cruz a la novena será más probable que salga cara, pero sigue siendo de un 50%. Hay que calcularlo de forma independiente, aunque nuestra mente se empeñe en lo contrario. Pero aunque pierda durante 8 veces seguidas seguiré apostando un 40% del premio al que aspiro si tengo un 50% de acertar. Es una apuesta con expectativa positiva en el largo plazo.
El caso contrario es exactamente igual, ese avispado jugador que hemos encontrado que apuesta 60€ contra 40€ nuestros a un cara o cruz, lo mismo la primera y la segunda apuestas las gana, ¿pero realmente habrá ganado?. Es más, será lo peor que le pueda ocurrir, el haber ganado gracias al azar y no a una operación con expectativa positiva (que son cosas muy distintas) lo que hará será motivarle para que siga haciendo lo mismo y siga apostando en contra de la estadística, de la probabilidad. Los números nunca mienten, lo que ocurre es que los mentirosos usan números. En su caso y tomando de nuevo bloques de 10 apuestas tenemos que en 5 apuestas gana limpios 5x40=200€ y las 5 veces restante que pierde lo hace de la siguiente forma; 5x60=300€, por lo tanto de cada 10 operaciones pierde 100€ o lo que es lo mismo 10 €/operación, que son los mismos que ganamos nosotros.
Pues bien, todo este pegotazo es perfectamente extrapolable a los mercados que es a donde yo quería ir a parar. Lo que ocurre es que en las operaciones bursátiles no es como en un cara o cruz en el que sabemos a ciencia cierta que tenemos un 50% de acertar. Yo tengo costumbre de calcular a ojo qué probabilidad tengo de ganar cada operación que realizo, por supuesto está claro que cuantos más motivos técnicos nos acompañen más probable será que nos salga bien. Por ejemplo en el artículo que hice de Apple la probabilidad de que nos saliera bien considero que era entorno a un 80% pero como en los mercados la facilidad brilla por su ausencia, aún realizando una operación en la que tengamos un 80% de probabilidades de ganar es posible que a la larga hagamos de ella una operación con expectativa negativa, ¿cómo es posible? muy simple, no respetando los stop loss, o colocándolos muy por encima de los posibles beneficios. Como tenemos un 80% pues de cada 10 operaciones ganaremos 8 y perderemos 2. Supongamos que cada vez que hemos ganado hemos sacado de media un 4%, 4%x8=32%, pero si en las dos operaciones que estadísticamente las cosas no saldrán como lo esperado y operamos sin stop, o aferrándonos a la operación y pensando cosas como: "joe, no me puedo salir si es que era de libro, tiene que salir bien, era compra muy clara, tiene que subir, a ver si mañana sube", en el momento en que dejamos las cosas al azar es que algo no hemos hecho bien. Supongamos que en cada una de esas dos operaciones las cerramos finalmente con pérdidas de un 18% de media, pues habremos perdido en tan sólo dos operaciones (18x2=36%) más de lo que hemos ganado en 8 operaciones. Y a quien no le haya pasado esto o algo muy similar alguna vez en su carrera bursátil es que es una máquina, porque es algo bastante común, sobretodo en nuestros inicios.
El hecho de comprar por ejemplo bankia con el único motivo de que está muy barata y no puede bajar más, si esta operación por azar o suerte nos saliera bien nos haría motivarnos a que sigamos actuando igual, habremos ganado una operación aislada, totalmente con expectativa negativa, pero será lo peor que nos haya podido pasar. Realmente hemos perdido y mucho en esa operación. Al ganar esa operación en un futuro compraremos Banco de Valencia, Popular, Pescanova..con el mismo planteamiento. Y nuestro dinero a la larga volará bien alto.
El hecho de ganar algunas operaciones no implica que estemos haciendo las cosas bien, igualmente el hecho de perder en varias ocasiones seguidas o entrar en una "mala racha" no implica que estemos haciendo las cosas mal, debemos profundizar y analizar nuestras operaciones en bloques de 10, ahí seremos más objetivos y podremos comprobar si realmente estamos actuando bien o por el contrario estamos actuando de pececitos de tiburones. Por eso es muy útil tener actualizado un diario de operaciones en el que pongamos todo aquello que se nos ocurra. Fecha de entrada, empresa, número de acciones, motivos, stop loss, stop profit, motivos de salida, beneficios/pérdida... etc
Espero haber podido transmitir la idea original del artículo, en el que ganar no siempre es una victoria y perder no siempre una derrota.
Suerte en los Mercados.