En España existen tres tipos de banca: particular, personal y banca privada. Estas dos últimas pueden ayudar a las personas con un nivel económico medio-alto a gestionar sus inversiones. Conoce las diferencias, ventajas e inconvenientes de cada uno de estos tipos de banca.
Diferencias entre banca para particulares, banca personal y banca privada
La banca para particulares es la banca convencional que todos conocemos: los bancos a los que acudimos a diario, en los cuales podemos realizar operaciones habituales, como ingresar o sacar dinero o el ingreso de la nómina. El banco para particulares es aquel banco en el que tendremos las cuentas, tarjetas o pequeños depósitos, hipotecas o préstamos.
Si nuestro capital aumenta, entonces podemos optar por la banca personal, que engloba los clientes que tienen un capital superior para ahorrar y/o invertir. Estos clientes, pese a que tienen un capital superior a los de la banca para particulares, no llegan a considerarse clientes de la banca privada. En la banca personal contaremos con un gestor que nos ofrecerá asesoramiento especializado.
El siguiente nivel será la banca privada, en el que se incluirá a aquellos clientes con un elevado capital superior, en la mayoría de los casos, superior a los 300.000€. La banca privada o patrimonial es la parte que gestiona grandes patrimonios. Los clientes reciben asesoramiento más personal y los productos ofrecidos son más complejos; por tanto, la banca privada se dirige a personas con un alto nivel económico.
Resumiendo...
- Banca para particulares: banca tradicional
- Banca personal: clientes con un buen nivel económico
- Banca privada: clientes con alto nivel económico
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¿Qué es la banca privada? Ventajas e inconvenientes
Centrándonos en la banca privada, que es quizá la menos conocida, veremos cuáles son sus ventajas e inconvenientes. Pero, comenzaremos por ver sus características.
Como hemos comentado, se trata de una parte de la banca convencional dedicada a la gestión de grandes patrimonios, ofreciendo un asesoramiento al detalle a los clientes llegando a tener cada cliente su propio gestor con el objetivo de definir una estrategia para la gestión integral del patrimonio, que permitirá conservarlo e incrementarlo en el largo plazo. Los productos ofrecidos son más complejos que los de la banca personal o para particulares y comprenden:
- La organización y administración del patrimonio familiar y empresarial.
- La optimización jurídica de la estructura patrimonial empresarial y familiar.
-
Una planificación financiero-fiscal eficiente.
Ventajas de la banca privada
Las ventajas de la banca privada van ligadas a sus características:
- El trato personalizado que ofrecen los banqueros a sus clientes
- La gestión personalizada y al detalle del patrimonio, ofreciendo productos exclusivos o con mejores condiciones
Desventajas de la banca privada
En cuanto a las desventajas de la banca privada, podemos destacar:
- Necesidad de alto patrimonio para formar parte de la banca privada
- Las comisiones que se han de pagar son elevadas a cambio del servicio personalizado.
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