Wall Street estaba con los ánimos exaltados. Las acciones estaban en un gran rally alcista por primera vez en varios años. Los precios estaban subiendo todos los días. Como nuevo inversor, yo quería participar en el big money, así que decidí entrar.
El sabio de mi tío me aconsejó: Nadie hace mucho dinero sin tomar muchos riesgos. Aun así me gustaban las posibilidades que tenía.
Un amigo del trabajo me recomendó investigar una pequeña compañía llamada “Little Gamble Inc”. Así que decidí llamar a mi corredor y decididamente le dije:
–Quisiera comprar 100 acciones de “Little Gamble Inc” –
Mi corredor respondió: –Cuando el viento sopla incluso los pavos vuelan–
– ¿Qué? – pregunté perplejo
–La marea alta hará que todos los barcos floten– respondió mi corredor
Ah? – dije yo, aun confundido. Vaya que Wall Street tiene una forma extraña de hablar.
–Lo que quiero decir– me explico mi corredor –es que “Little Gamble Inc” es un chicharro. Está bien mientras el rally alcista siga, pero se desplomará cuando el mercado tome rumbo hacia el sur–
Hizo una pausa y entonces me recomendó: – No pongas todos tus huevos en una sola canasta. ¿Por qué no mejor compras un grupo de acciones para diversificar? Yo recomiendo “Diversified Fund”, es un fondo bien diversificado. Tiene buen track record y está obligado a moverse hacia arriba junto con el mercado–
– ¿Cuánto cuesta? –
–50 dólares la acción–
Compré el fondo feliz y rápidamente subió a los $60, que era algo muy bueno para un Fondo. Después subió a los $70. Yo me sentía en el séptimo cielo. Llamé a mi tío y él me sugirió tomar parte de las ganancias. El solía decir: –Recuerda sobrino, los arboles no crecen hasta el cielo. Cuando un lechón se convierte en cerdo, es sacrificado– Pero yo no le escuché. Estaba tan excitado y era demasiado divertido como para vender tan pronto.
Llamé a mi corredor y le dije que comprará más acciones del Fondo. Mi corredor me respondió:
–Desempeño pasado no es garantía de ganancias futuras, pero el mercado aún se ve bien. Yo siempre digo don’t fight the tape. Deja tus ganancias correr-–
Y entonces compré 100 acciones más.
Pero de repente el mercado cayó en picado y mi fondo bajó a $65. Llamé a mi bróker para expresarle mi preocupación.
– ¿Debería vender parte y tomar mis ganancias? – pregunté
–Nunca se pierde dinero por tomar las ganancias– respondió mi bróker –pero yo no recomendaría vender en este momento. Los Bull markets tienen que superar la Wall of Worry. Tranquilo, es sólo una corrección dentro de este mercado alcista. Espera un poco, el mercado dará la vuelta. Patience in market is worth pounds in a year–
– ¿Qué fue eso? – No entendí muy bien lo que quiso decir, pero me sentí un poco aliviado, al menor de momento. Desafortunadamente el mercado siguió cayendo y ahora parecía más un crash que una simple corrección. Ahora mi fondo estaba debajo de los $50, mi precio original de compra. Me comencé a poner muy nervioso y hablé a mi corredor.
–Ese fondo que me vendiste…– comencé a decirle, pero él me interrumpió.
–Conoce el Valor, no el precio– me dijo en un tono filosófico. –El prospecto para el largo plazo de tu fondo es excelente. No te preocupes por las depresiones del mercado en el corto plazo–
No estaba completamente cómodo con sus palabras, pero qué podía yo hacer. Después de todo en la tierra del ciego, el tuerto es rey.
Sin embargo, el mercado veía las cosas diferente y no pasó mucho tiempo antes de que el precio de mi Fondo cayera a los $30 por acción. En ese momento me resigné a mis pérdidas. –He perdido mucho y no tiene sentido vender, bien podría aguantar hasta que el mercado de la vuelta– me dije a mi mismo.
Mi corredor estuvo de acuerdo. –Es buen momento para promediar a la baja y comprar más acciones. Cuando el mercado se recupere tendrás una ganancia instantánea–
No estoy muy seguro de lo que quiso decir, pero seguí su consejo y compré 100 acciones más mientras el precio caía. Y vaya que cayó. Wall Street estaba ahora en medio de un mercado bajista o Secular Bear Market, como lo llamó mi bróker. No tardó mucho para que mi fondo cayera a $10.
Francamente, estaba harto y cansado de esperar y ver mí cuenta disminuir su valor prácticamente todos los días. Podría perder mi inversión entera. Un día llegué a mi punto de quiebre y decidí deshacerme de mi terrible Fondo.
Pero antes de llamar a mi bróker hablé con mi tío. Quedé sorprendido por su actitud.
–Sobrino, es bueno que hayas perdido dinero. No es bueno ganar dinero en tu primera inversión, porque entonces pensarías que es muy fácil– Después añadió: –Compraste en máximos. No hagas más grande tu error vendiendo en mínimos– El tuvo el descaro de recomendarme comprar en vez de vender en esos momentos. Dijo algo acerca de comprar sombreros de paja en invierno, pero no entendí qué quiso decir.
–Buy on mystery, sell on history. Cuando la gente está vendiendo, es momento de comprar– me aconsejó.
Pero yo no estaba de humor para escuchar. Llamé a mi corredor y antes de que me pudiera interrumpir, le ordené que vendiera todo.
–Vende, no quiero oír ninguno de tus argumentos ni frases. Sólo hazlo–
Mi bróker ejecuto mis órdenes obedientemente y vendió mis acciones a $10.
El único consuelo que mi corredor me pudo dar fue: –Alégrate. La peor cosa que le puede pasar a un nuevo inversor es ganar dinero en su primera inversión. Lo harás mejor la próxima vez–
–Sí, ya he escuchado eso antes– dije yo.
El mercado finalmente comenzó a subir nuevamente. Mi Fondo subió a $20. –Maldición–
Por pura curiosidad llamé a mi bróker para saber que pensaba.
–Sólo es un pequeño respiro antes de que siga cayendo, un Dead cat bounce– dijo mi bróker. –No metas dinero bueno al malo–
Vaya!!! Estaba sorprendido de que mi bróker fuera tan bearish como yo lo era. Sin embargo, el mercado tiene una mente propia y siguió subiendo. Mi ex-Fondo subió a $30. Ahora parecía que la recuperación del mercado era real. Llamé nuevamente a mi corredor, pero él seguía siendo pesimista.
–Es demasiado tarde ahora. Hubieras comprado a $10 o $20. Ahora ya no es una ganga. Pero no te preocupes. No puedes besar a todas las chicas guapas. Afortunadamente, hay más de una forma para escalar una montaña. Un nuevo tren deja la estación cada 10 minutos. Estoy seguro que otra buena oportunidad de inversión aparecerá pronto. Seamos pacientes y permanezcamos en liquidez. Después de todo, nunca se pierde dinero estando fuera del mercado.
Era un buen consejo, o al menos eso pensé en ese momento, pero aún estaba ansioso por obtener beneficios en el mercado. “Comprar barato, vender caro”, no era ese el objetivo? Era más difícil de lo que imaginé en un principio.
El golpe final vino unas semanas después, cuando mi ex-Fondo estaba en $50, el precio al que yo había comenzado hace un año. Wall Street volvía a la cima y yo no era parte de ello.
Supuse que si había sido una buena compra a $50 hace un año, debería de ser mucho mejor ahora. Llamé a mi bróker y le dije:
–Estoy cansado de tus consejos. Compra el Fondo y no me hables de nada–
Después de pasar por todo esto, no estoy seguro de que yo sea hoy un mejor inversionista. He visto que el precio de mi fondo recientemente estaba a $4. Sigo hablando con mi corredor y a veces es de ayuda.
Me dijo: – tienes que besar a muchas ranas antes de encontrar a tu príncipe–
Supongo que está en lo cierto, pero el sabio de mi tío ya me lo había advertido cuando me dijo que un corredor está, más que nada, a menudo en el error y rara vez en duda.