Hasta ahora la única manera de obtener el pago de facturas por adelantado para un negocio era acudiendo a una entidad financiera o a una compañía privada de descuento. Sin embargo, ha surgido una nueva manera de financiar a pymes que tienen créditos comerciales pendientes de cobrar: el crowdfactoring. Veremos qué es y cómo, tanto empresas como inversores pueden beneficiarse de esta práctica.
¿Qué es el crowdfactoring?
El crowdfactoring es una fuente de financiación alternativa para empresas que ha aparecido tras el auge del crowdfunding y los préstamos entre particulares. El crowdfactoring se caracteriza por reunir los ahorros más de un inversor particular para financiar el adelanto de facturas de las empresas que lo hayan solicitado. Esta podría considerarse como una relación win-win, pues el ahorrador obtendrá una rentabilidad por ese dinero prestado cuando venza el periodo de devolución, que puede ser de 30,60,90 días, por ejemplo, y la empresa porque obtendrá esa financiación de forma anticipada, además, sin recurrir a los procesos largos y burocráticos de solicitar dicha financiación en una entidad bancaria.
¿Qué ofrece el crowdfactoring a los inversores?
A través del crowdfactoring, los inversores pueden acceder a los pagarés, es decir, al derecho de cobro de esas facturas para las que han adelantado el dinero con su inversión. Hasta ahora esta opción era casi exclusiva de las entidades financieras y las compañías privadas de factoring. Además, aparte de obtener una rentabilidad por esa inversión, el inversor tiene la posibilidad de diversificar los riesgos inherentes a cualquier inversión desde importes muy bajos, pues es una inversión totalmente descorrelacionada de cualquier otra.
Este modelo de negocio permite que los inversores tengan acceso directo a la información de las empresas emisoras de los efectos, y decidan el importe que quieren prestar a cada compañía y en qué condiciones.
¿Y para las pymes?
Para las pymes supone una alternativa a la financiación bancaria cuya ventaja radica en el hecho de no tener que aportar garantías personales. Las empresas sólo tienen que proporcionar sus pagarés para poder acceder a la financiación que necesitan.
Además, la financiación a través del crowdfactoring no figura en el CIRBE (Central de Información y Riesgos del Banco de España), por lo que no impide obtener otro tipo de financiación en el sistema financiero.
¿Qué inconvenientes tiene el crowdfactoring?
El mayor inconveniente es el riesgo de impago. En ese caso, la empresa de crowdfactoring es la encargada de gestionar el recobro de morosos. Hay plataformas de crowdfactoring que nos ofrecen la posibilidad de contratar operaciones 100% aseguradas, como es el caos de Emprestamo.com, por lo que este inconveniente desaparecería en este tipo de operaciones.
¿Cómo se fija el precio del préstamo?
Este aspecto dependerá de la plataforma de crowdfactoring que hayas elegido. Siguiendo con el ejemplo anterior, Emprestamo.com lo que hace es presentarnos la cantidad total que necesita por adelantada la empresa, junto con el rating de al operación y demás información de interés, y cada inversor decide qué cantidad invertir, siendo el mínimo 50€. En ese caso ya conoceríamos de antemano la rentabilidad de la operación.
Existen otras plataformas que fijan el precio por un método de subasta.
¿Cómo se determina el rating de una empresa?
El rating es una calificación que empresas especializadas realizan para evaluar la solvencia financiera de determinadas empresas. Así, a cada operación de crowdfactoring podemos atribuirle un nivel de riesgo y determinar si queremos invertir o no, o si la rentabilidad nos parece adecuada para ese nivel de riesgo.
Es importante remarcar que este rating lo realizan empresas o expertos en solvencia financiera. Cada plataforma de Crowdfactoring establecerá un rating propio. Por ejemplo, el rating de emprestamo.com, empresa de crowdfactoring en España, va del 1 al 10, siendo el 1 una operación de mayor riesgo posible y el 10 la mínima.
¿Qué empresas de crowdfactoring existen?
En el mundo existen diversas empresas de crowdfactoring, entre las que podemos destacar, Emprestamo en España, Business Factors Finance en Estados Unidos y Open Company en Reino Unido.
¿Está ganando terreno la financiación alternativa a la financiación bancaria? ¿Tendrá el mismo éxito que el crowdfunding?