Ayer comentaba un post sobre el turno de Trichet, en el que reconocía que no me veía capaz de anticipar lo que iba a hacer el tal Trichet hoy. Y hay que reconocer que lo que ha hecho tiene un merito increíble. Ha conseguido sorprenderme cuando esperaba de todo.
Hablaba de que podía tratar de usar políticas monetarias restrictivas o podía usar políticas monetarias expansivas, o podía hacer una mezcla. Pues lo que nos encontramos es que a fecha de hoy, no está nada claro lo que ha hecho, pero en mi opinión, lo que ha hecho es lanzar un claro mensaje para subir el valor del euro, y ha lanzado el mensaje de que no habrá QE, (habla de que sigue con la esterilización monetaria), de forma que al final lo que busca es revalorizar el euro.
Por supuesto, para frenar la sangría tenía que inyectar dinero en cantidades industriales, lo cual llevaría a la caída del euro. O sea que estaba en un problema.
Pensemos en la locura que ha pasado en estos dos días, que se ve en todos los mercados, con especial protagonismo para el IBEX o el euro. El Banco Central Europeo, intervino a lo bestia el día que el euro caía por debajo de 1,30. En esos momentos, nos encontramos con una reacción espectacular, sin anuncios y desde luego de la que nos hemos enterado todos a toro pasado. Y ha sido inyectar dinero, sin decir cuánto.
El 2 de diciembre, suelta un discurso que en principio decepciona; por supuesto tenemos que asumir que el bce sabía que iba a decepcionar, (porque lo sabían hasta los charcuteros); los mercados financieros caen en minutos de forma que el euro cae hasta los 1.30; el ibex que estaba subiendo un 2% pasa a caer un 1,5% y el resto de commodities y bolsas, en una situación similar. Sin embargo, en cuestión de minutos, todo se dispara, a pesar de los malos datos de USA. Y al final queda claro, mientras Trichet aún estaba dando el discurso, (en el que decepcionaba las expectativas de líquidez) el banco central intervino contradiciendolo en los mercados a lo bestia. (en cotizalia hablan de compras de deuda por importe superior a 100.000 millones).
Pues se me ocurren tres explicaciones para explicar esta situación, ambas teniendo en cuenta el hecho de que el bce necesita subir el euro, y que además no puede hacer inyecciones masivas del dinero ni dejar en el mercado la sensación de que ha lanzado un QE, (lo cual es un problema para subir el euro).
La primera explicación parte de la hipótesis de que la jugada haya sido planificada; y en este sentido la explicación sería que combinó el discurso restrictivo, (para subir el euro), con una demostración de fuerza para los bajistas. O sea, lo que viene a ser un farol. Si logra asustar a todos los bajistas, en principio puede parar las caídas por un tiempo sin tener que poner los billones que se le piden. Claro que tiene un pequeño fallo; quitando a los bajistas del medio, nos encontramos con que el problema es que no existan alcistas, por lo que este plan tiene poco recorrido, sobre todo porque además los especuladores no es que tengan demasiado miedo; y al final tendrán que elegir entre apostar o no; el que sea bajista puede salirse, pero no se va a convertir fácilmente en alcista, sobre todo cuando estamos hablando de países en quiebra.
La segunda explicación parte de la hipótesis de que la jugada no haya salido como estaba planeada. En este sentido, la hipótesis es que Trichet anticipase la caída de los mercados y el bce estuviese preparado para ir interviniendo compensando las caídas, sirviendo de contrapartida a los que se retirasen para no permitir las caídas, y de esta forma dejar la sensación de que la situación era mejor de lo esperado. En definitiva, algo parecido a la que preparó el 5 de junio de 2008, cuando anunció la subida de tipos de julio, que disparó los mercados, pero que nos llevó a todos a la ruina. Dejar la sensación de que la situación estaba tan bien, ahorraba también muchas intervenciones, cambiando confianza por liquidez.
O sea que buscase una intervención discreta, pero que haya fallado, porque las caídas de los mercados financieros fuesen más pronunciadas y violentas de lo que el banco central hubiese previsto, de forma que se ha visto claramente la jugada. En contra de esta hipótesis, nos encontramos con la actuación de ayer, (tampoco fue muy discreta) y a favor está el hecho de que probablemente las reacciones de la banca de inversión y sus sistemas automáticos probablemente fuese más rápida que la del BCE, de forma que primero estaría la caída y luego la reacción, y las diferencias de tiempo fuesen la reacción.
La tercera hipótesis es que simplemente no hubiesen calibrado la caída que se podía esperar y que realmente se les ha ido de las manos, tanto la noticia, como el día de ayer y al final no le quedase al BCE más opción que entrar con todo.
Por supuesto, existen sustanciales diferencias para saber en qué situación estamos y en la velocidad de los acontecimientos que se pueden suceder en cada uno de los tres escenarios, y sinceramente no tengo claro ante cuál de ellos estamos, (o incluso que me haya olvidado de alguno), aunque si tengo que apostar es por el tercero. Cuando el euro bajó de 1,30 intervino con todo, (ayer), y cuando el mercado se derrumbó después de su charla, entró con todo también.
En todo caso, y aún admitiendo que el plan es innovador y sorprendente, e incluso que pueda parecer brillante, lo que tenemos que entender es que el Banco Central se ha cargado un poco más el sistema financiero y económico. Sea una demostración de que puede manipular el mercado cuando quiera, (y que no va a dudar), sea el caso en el que intentaba hacer una manipulación del mercado discreta que no le ha salido, o haya sido una manipulación del mercado de emergencia, lo que está claro es que creo que nadie es capaz de entender que es una MANIPULACIÓN. De esto no hay duda, y en consecuencia, lo que tenemos es que los mercados no son ni transparentes, ni libres, y desde luego no valoran los distintos activos desde el punto y hora en que los reguladores entran de esta forma a modificar las valoraciones.
Por supuesto, esto no es ninguna novedad y de hecho todos los bancos centrales llevan usando estas tácticas sin ningún rubor, hasta el punto que ya no se sabe si es mejor la actitud de la FED que publica sus POMOS, (intervenciones en los mercados), o la del BCE que no da ningún tipo de información. Y por supuesto, hoy el BCE no se ha cargado nada que no estuviese ya demasiado dañado. Aunque desde luego le haya asestado otro buen golpe a las condiciones necesarias para que un mercado pueda considerarse eficiente. ¿Podemos mantener el discurso de que los mercados valoran eficientemente cuando vemos tan claramente distorsiones salvajes que por pura definición alteran las valoraciones?. ¿Podemos mantener el discurso de que el mercado es el que valora las distintas monedas cuando un banquero central intenta asustar a los que consideran que la moneda está demasiado alta?; o la pregunta que alguien debe hacerse de una vez: ¿Puede funcionar un mercado cuando el regulador, que entre otras cosas ha de evitar la manipulación, es el primero que lo manipula?.
Dicho de otra forma, esto se ha prostituido de tal forma, que de mercado tiene sólo el nombre y en realidad es imposible defender otra cosa que esto no es más que un cachondeo de proporciones absurdas.
Por supuesto, la credibilidad de Trichet, (esta que hasta ayer era tan importante y capital para él), se ha ido a tomar gárgaras, porque no se puede salir a dar un discurso dando a entender una cosa, y al mismo tiempo retratarse haciendo la contraria en el mismo momento. Ya por no hablar de lo que comenté en el rescate a los bancos de mayo, en referencia a todos los discursos previos de que no iban a salvar a la banca.
Y solo me queda el pequeño detalle de que hago con los put de euro que he comprado. Lo cierto es que lo he estado pensando toda la tarde si venderlos o no. Y al final he llegado a una conclusión. Paso de venderlos ya que si en su día era consciente de que realmente el problema de tal locura era luchar contra los bancos centrales, implícitamente era consciente de que los bancos centrales iban a intentar hacer subir el euro. ¡Por tanto, nada nuevo!; por supuesto, si que me ha sorprendido bastante lo que ha hecho, pero en definitiva no cambia el resultado final. Si el euro sigue alto, las tensiones sobre los países se van a multiplicar, sobre todo cuando están tomando medidas que destrozan los sistemas económicos, (los de la economía real), para intentar retrasar el colapso del sistema financiero. De forma que no se puede sostener este discurso, con hechos contrarios y una realidad que cada día pesa más.
Quizás haya conseguido ganar tiempo, (y probablemente tampoco demasiado), pero nada más por lo que al final he decidido mantener por ahora los dichosos put, y ya de paso, me he gastado un poquito más para comprar puts de petróleo a 65 y 60 para febrero y mayo de 2011.
Y sí, sigo sin ser trader y reconozco que ni de coñas recomiendo estas inversiones. Nadie crea que esto es un disclaimer; es simplemente que va contra lo que quieren los bancos centrales que están demostrando que no tienen límites a la hora de manipular. En algún momento tendrán un límite y yo creo que han llegado o están muy cerca, pero hoy es el ejemplo perfecto de que pueden sorprender. Por eso no recomiendo lo que hago, (y por supuesto tampoco voy a recomendar lo que no hago).