El alivio de la deuda es un sentimiento que se produce al resolver un problema económico o de sobreendeudamiento. Además, refleja cualquier esfuerzo que realiza un deudor para reducir su deuda o eliminarla definitivamente, generalmente con la ayuda de profesionales, con la colaboración de acreedores o terceros.
El alivio puede se puede conseguir de los siguientes modos:
Pago de la deuda
Pago de la deuda Implica negociar con los acreedores para pagar una deuda menor del total de la deuda. A esta modalidad se le llama también “quita de la deuda”.
A veces, la opción la plantean empresas con ánimo de lucro que, en primer término, pactan con el deudor el pago a dichas empresas de una cantidad mensual completa, fijada en un contrato y, estas empresas las que, por cuenta del deudor, distribuyen un único pago mensual entre diferentes acreedores.
Esta operativa se basa en la idea de que los acreedores aceptarán el pago de una cantidad menor de la deuda en vez de arriesgarse a no cobrar nada del deudor.
A nuestro juicio, este sistema resulta muy desventajoso y arriesgado. La razón por la que lo afirmamos es que, a pesar del ofrecimiento de pago de una parte de la deuda, no hay garantía de que los acreedores acepten dicha negociación y si no consta su aceptación, siempre tendrán disponible reclamar en los juzgados el importe de la deuda no abonada. De hecho, es probable que sus acreedores le cobren cargos adicionales por pagos atrasados, aumenten sus tasas de interés y le incluyan en ficheros de morosos, etc.
Consolidación de deudas
La consolidación de la deuda es el proceso de agrupar varias deudas en una sola. De manera similar a la refinanciación, implica obtener un nuevo préstamo o tarjeta de crédito para pagar deudas antiguas. Lo ideal es que la consolidación le permita obtener mejores condiciones (como tasas de interés más bajas o pagos más asequibles) para su deuda.
Ley de Segunda Oportunidad
Enmarcada en el Texto refundido de la Ley Concursal, la Ley de Segunda Oportunidad es un proceso legal que da como resultado la condonación (perdón) de parte o la totalidad de su deuda.
Mucha gente piensa en la liquidación de deudas como un borrador mágico que los llevará a hacer borrón y cuenta nueva. Sin embargo, no es tan simple. La liquidación de deudas es un acuerdo realizado entre un acreedor y un consumidor en el que se reduce el saldo total de la deuda y/o se renuncia a las tarifas, y el monto de la deuda reducida se paga en una suma global en lugar de rotar mensualmente.