Si bien es importante tener en cuenta la estrategia a seguir a la hora de especular en bolsa así como el conocimiento de las herramientas que vamos a usar y del funcionamiento de nuestro broker no es menos importante que tomemos buena cuenta de nuestras operaciones registrándolas todas pormenorizadamente lo que, a la larga, nos permitirá incluso trabajar con esos datos para optimizar nuestra gestión del capital. Hoy explicaré como lo he hecho yo hasta ahora y mostraré la tabla que uso actualmente para anotar mis operaciones.
1.- Lo primero que nos debemos preguntar es el tipo de operativa que realizamos con nuestro broker. Yo he optado por practicar ambas disciplinas totalmente opuestas. Por una parte la inversión en valor a largo plazo buscando una alta rentabilidad por dividendo y una diversificación suficiente y por otra la realización esporádica de operaciones especulativas puntuales con entradas y salidas de gran volumen concentradas en un solo valor. Una primera recomendación es que tengamos un broker para cada estrategia. En primer lugar porque el tipo de comisiones que nos convienen para cada tipo de operativa es distinto. Y en segundo lugar porque nos ayudará a clarificar mejor nuestra cartera separando claramente los activos dedicados a cada una de las estrategias. De los detalles sobre mi estrategia de inversión diversificada a largo ya he hablado ampliamente en Diversificando con poco capital inicial y en mis tres entradas tituladas, Mi cartera experimental (I, II y III). Bastará con que diga aquí que hago uso del broker ING direct con la promoción activada. Y es que este es un broker muy adecuado para este tipo de operativa a largo plazo. Respecto a las operaciones especulativas uso, como también he dicho repetidamente aquí, el broker de OficinaDirecta también con la condición Premium activa con la cual las comisiones de compra/venta se reducen al mínimo. Y es que este otro broker es adecuado para operaciones de este tipo aunque limitadas al mercado español que es donde sus tarifas son realmente competitivas.
2.- El segundo asepecto relevante es la herramienta que vamos a usar para controlar nuestra cartera y nuestras operaciones especulativas. Una vez más yo no recomiendo usar la misma herramienta en ambos casos ya que responden a metodologías diametralmente opuestas. Para la inversión a medio-largo plazo uso la propia utilidad de Rankia que lleva el nombre de Mi Cartera. El programa es ideal para calcular la rentabilidad acumulada en una inversión realizada en aportaciones fraccionadas y para tener en cuenta todos los dividendos cobrados hasta la fecha. Para mí es más que suficiente y considero que permite ver de un plumazo el estado de nuestra inversión en renta variable ya que presenta conjuntamente nuestras acciones y fondos dandonos una buena visión global. Por lo que respecta a las operaciones especulativas hago uso de una tabla excel confeccionada por mí mismo. Como ya dije en el punto uno es importante separar debidamente nuestras estrategias para no mezclar las cosas y evitar hacernos un lío. Además de que así podremos comparar cuánto rentabilizamos nuestro capital de inversión y nuestro capital de especuación pudiendo evaluar en cual de los dos campos tenemos un mejor desempeño.
Plantilla de control de operaciones
La plantilla que presento la he optimizado especialmente para una operativa con una sola operación especulativa cada vez aunque podría funcionar con varias siempre y cuando se especificaran las fechas de compra/venta. Si vamos a especular un poco lo primero que debemos preguntarnos es si vamos a especular con una sola operación o con varias simultáneas. Diversificar en inversión a largo como ya expliqué no es difícil ya que podemos ir invirtiendo con paquetes pequeños de 200 a 300 euros que vamos a dosificar mes a mes. Sin embargo en las operaciones especulativas para sacar provecho vamos a necesitar paquetes al menos diez veces superiores. Yo no recomendaría especular con un saldo menor a 6000 euros en nuestra cuenta y eso teniendo comisiones bajas claro. Aunque mi recomendación es que ronde los 10.000 mínimo. Así las cosas. Así, si contamos con un capital de ese orden para especular no vale la pena que pensemos en diversificar por lo que yo, no me lo he planteado. Para alguien que disponga de, digamos, diez veces más sí sería una opción además de que sería recomendable ya que con cantidades tan elevadas le sería difícil entrar bien en los valores, especialmente en los menos líquidos. Así que entonces mi consejo sería que se dividiese su capital en paquetes de 10 a 20000 euros para realizar entradas en valores distintos en los que nuestro sistema de inversión nos de señal de entrada.
Para empezar aquí teneis una plantilla de ejemplo del fichero que uso actualmente: plantilla_operaciones.xls
Yo tengo esta tabla formando parte de mi fichero de contabilidad (vease contabilidad casera II) como una hoja separada. Así, podemos tener todo integrado en un único fichero donde controlamos a la vez nuestra contabilidad y nuestras operaciones bursátiles.
Las operaciones expuestas son una muestra algunas de ellas reales otras de ejemplo. Pero lo importante no son las operaciones en sí sino la información que aporta la tabla que es de lo que vamos a hablar. Repito, las operaciones son un ejemplo para mostrar el funcionamiento de la plantilla, nada más.
Ahora pasemos a analizar y diseccionar el contenido de la tabla y la información que aporta cada campo.
Columna A (Valor): En esta columna no solo pondremos el nombre del título con el que hemos transaccionado sino que añadiremos en él notas comentando las motivaciones de la operación y sus resultados etc. Lo ideal sería que cada operación tuviese su comentario obligándonos así a justificar cada acto.
Columnas B y C (Compra y Venta): En la columna B colocamos el precio de compra que es el de entrada en la operación y en la C el de venta con el cual podremos ir jugando para ver los beneficios o pérdidas que tendríamos al cerrar la operación. Una vez cerrada obivamente quedará fijado definitivamente.
Columna D (Stop Loss): Aquí colocaremos el precio por debajo del cual consideramos que nuestras previsiones se han invalidado o bien que suponen la máxima pérdida que estamos dispuestos a soportar.
Columna E (Número de títulos): Ya lo dice el título, aquí vamos a indicar el número de títulos comprados.
Columna F (Bruto): Aquí incluímos el beneficio absoluto de la operación sin tener en cuenta ni comisiones ni impuestos. Esta columna se autocompleta mediante la fórmula (C-B)*E .
Columna G (Comisiones): El coste de las comisiones, las pagadas a la bolsa más las pagadas al broker. Esta columna también se autocompleta. Aquí la fórmula variará según el broker con el que trabajemos y tendremos que adaptarla a nuestra situación particular. Idealmente nuestra operación se abrirá a un solo precio y se cerrará en otro pero algunas veces puede que entremos en varios precios distintos lo que seguramente nos penalizará entonces será recomendable modificar manualmente sumando a la fórmula existente el coste añadido. También tendremos que tener en cuenta el tramo en el que operamos ya que la fórmula podría cambiar. En esta tabla hay operaciones de ejemplo en dos tramos distintos, el de 300 a 3000€ y el de 3000 a 35000€. La fórmula de esta columna es la más compleja de todas pues trata la suma de las comisiones del broker, los cánones de bolsa aplicados por BME y los costes de liquidación aplicados por Iberclear. (Véase: comisiones y brokers). Como ejemplo aquí tenéis la función que uso yo: -4,01-4,65*2-B*E*0,00012-C*E*0,00012-(MIN(MAX(0,10;E*B*0,000026);3,5))-(MIN(MAX(0,10;E*C*0,000026);3,5)). Dónde los -4,01 son la comisión que me carga el banco, -4,65*2-B*E*0,00012-C*E*0,00012 las comisiones de BME y -(MIN(MAX(0,10;E*B*0,000026);3,5))-(MIN(MAX(0,10;E*C*0,000026);3,5)) las de Iberclear.
Columna H (Neto): Aquí colocamos el beneficio neto de la operación descontadas ya las comisiones. Podríamos aplicar los impuestos pero dado que se pagan al año siguiente en la declaración de hacienda y dado que el fisco nos permite cancelar pérdidas con beneficios no aconsejo aplicarlos aquí ya que no sería realista. Así pues la fórmula que uso para esta columna queda como sigue: F+G donde se suman los beneficios brutos al coste de las comisiones.
Columnas I y J (Rentabilidad y rentabilidad real): El cálculo de la rentabildad es muy sencillo y basta con comparar los precios de compra con los de venta mediante la fórmula (C-B)/B . Sin embargo, debido a las comisiones esta no es la rentabilidad real de la operación que siempre se ve reducida por dichos costes. Para calcularla hará falta usar una fórmula que relacione las ganancias netas con los gastos de compra añadiendo a estos las comisiones que en mi tabla relaciona las columnas de la siguiente forma: (E*C-E*B+G)/(E*B) . Normalmente esto es suficiente pero puede darse el caso de que en medio de la operación se de el cobro de dividendos. Es algo que hay que procurar evitar ya que muchos brokers aprovechan para cobrar más comisiones pero que a veces debido a la duración de la operación puede resultar inevitable. El cobro de dividendos suele venir, además, con los impuestos pagados lo que aun reduce más la rentabilidad. En caso de ocurrir lo que yo hago es añadirlo a la fórmula así: (E*C-E*B+G+N)/(E*B). Los dividendos los pongo pues en una columna adicional, la N. Naturalmente, podríamos añadirlos manualmente en los pocos casos en los que hubiera que tenerlos en cuenta, esta es una opción igualmente válida.
Columnas K y L (Capital y capital total): En la columna de capital la tabla nos calcula el dinero que recibimos al salir de la operación (B*E+F+G+N) y en la de capital total nos lo suma a la cuantía total del capital designado a la cuenta. L(n-1)+F(n)+G(n)+M(n)+N(n). Dado que la fórmula hace referencia al valor del capital total de la fila anterior (Ln-1) ha de existir en la tabla una celda en la que conste un capital inicial y eso es lo que ponemos en la primera fila que no pertenece a ninguna operación y que simplemente nos da la cifra de partida.
Columna M (Aportaciones y rescates): Usualmente aportaremos o rescataremos dinero de nuestra cuenta ya sea porque tenemos gastos o bien porque queremos incrementarla. Estas variaciones las introduciremos manualmente.
Columna N (Dividendos): Lo dicho aquí van los dividendos cobrados a lo largo de la operación en caso de haberlos. También se introducen manualmente.
Columnas O y P (Fechas de compra y venta): Aquí se ponen las fechas en la que se inicia la operación y en la que se finaliza. Es importante que estas columnas estén en formato fecha ya que sino la columna Q no calculará bien.
Columna Q (Beneficio acumulado): Esto es, como dice el título, el beneficio sumado a lo largo de las diferentes operaciones. Las operaciones fallidas producirán retrocesos en nuestra cuenta y las exitosas producirán avances en el valor de la columna Q. La fórmula es Q(n-1)+H(n).
Columna R (Duración en días): Nos calcula mediante la fórmula P-O+1 el número de días en los que hemos estado expuestos al mercado, así una operación intradía tendría un valor 1 y una operación de una semana un valor 5.
Subtotales mensuales y coste oportunidad: En la columna H que contiene los beneficios netos pongo a fin de mes sus subtotales. Un motivo es el de poder comparar como varía nuestra suerte y habilidad mes a mes. La segunda razón es la de evaluar el coste oportunidad en caso de no ganar mucho. El coste oportunidad es aquello que dejamos de ganar por escoger una inversión con beneficio A en vez de otra con beneficio B. Si el beneficio de la operación más segura, un depósito o un bono del tesoro por ejemplo, supera o se encuentra muy cerca del beneficio de la operación arriesgada entonces no compensa y no lo estamos haciendo bien. Para que una operación arriesgada compense debe superar ampliamente el beneficio que obtendríamos en la operación segura. En el caso del ejemplo que hay en la plantilla queda claro que no compensan las operaciones ya que metiendo el dinero en un depóstio habríamos ganado casi lo mismo. Sin embargo para tener en cuenta debidamente el coste oportunidad no solo debemos comparar nuestra rentabilidad con las inversiones clásicas a plazo fijo sino también con el rendimiento de la bolsa durante ese periodo para compararlo con una gestión pasiva del mismo capital. Porque si el total de nuestras operaciones un mes nos arroja un mísero 0.1% de ganancias pero la bolsa durante ese mismo periodo pierde un 5% no habremos hecho las cosas tan mal aunque el coste oportunidad sea malo comparado con la inversión a plazo fijo pero no lo será con respecto a la evolución del índice.
Gráfico de la evolución del capital: Por último la tabla dispone de un gráfico en el que se muestra punto a punto el progreso de la cuenta. Lo que hacemos es unir mediante lineas los puntos de la columna del beneficio acumulado, las Y, y representarlos respecto a las fechas de cierre de las operaciones que serán las X. Con eso podremos apreciar un progreso temporal de nuestro capital y ver como evoluciona la cuenta a lo largo del tiempo. En el ejemplo se presenta la cuenta sufriendo un bajón inicial (drowdown en inglés) para luego remontar y alzarse en ganancias días después.
ACTUALIZACIÓN: Amoreg66 nos comenta la conveniencia, que también comparto, de poner en una columna más el máximo drowdon que ha sufrido la operación, esto es el mínimo de cotización por debajo del precio de compra. Saber esto, como bien dice, nos da una idea del riesgo en el que hemos incurrido en relación al beneficio obtenido. Es un dato relevante porque no es lo mismo un drowdown de 100 euros para un beneficio de 200 que uno de 1000 para el mismo beneficio. En el primer caso la relación riesgo/beneficio es mucho mejor que en el segundo. Yo incluso sugeriría el cálculo de un coeficiente de riesgo que relacionaría, justament, ambos valores. En la columna del drowdown lo indicaría en %. Luego calcularía el cociente entre la rentabilidad y el drowdown. Si el cociente es superior a 1 nuestro beneficio será mayor que el máximo drowdown. Un coeficiente muy por debajo de uno, cercano a cero, nos indicaría que la operación ha sido de alto riesgo. Si salimos en pérdidas el cociente será negativo. Dado que, por definición, nunca podremos vender el valor por debajo del máximo drowdown este no podrá bajar nunca de -1. Así este cociente de riesgo tendría un rango que iría desde +infinito a -1. Una primera clasificación mediante este cociente podría ser la siguiente. (-1,0) sería el rango de las malas operaciones, (0,1) operaciones mediocres, (1,2) buenas operaciones, (2, +inf) serían las operaciones muy buenas, excelentes y estratosféricas caso de valores elevados del mismo.
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En conclusión: Lo que se presenta es un ejemplo viable de tabla que nos permite controlar nuestras operaciones especulativas y agruparlas y darles contexto. Contener la información no solo numérica sino también insertar notas donde podemos detallar los sucesos que no ven los números explicar porqué entramos y porqué salimos. Siempre es un sano ejercicio tratar de explicarlo porque podemos entonces darnos cuenta de porqué hacemos lo que hacemos y si tiene sentido, rigor y constancia nuestra estrategia o plan. O bien si somos erráticos e inconstantes lo que sería una señal para dejarlo estar o para cambiar nuestra manera de proceder. Otra gran virtud de la tabla es que calcula las rentabilidades y ganancias por nosotros por lo que en cierto modo puede usarse también a modo de calculadora de mercado introduciendo hipotéticos precios de entrada y salida y viendo que ganancias podríamos obtener. Finalmente, solo decir que esta plantilla es un ejemplo y que quien quiera usarla deberá personalizarla a sus necesidades obviamente. Pero es un buen punto de partida para empezar a registrar cada una de las operaciones que realizamos.
Y esto es todo por hoy espero que sea de provecho, saludos y hasta la próxima.
