Terminamos la semana con ventas severas en todos los mercados bursátiles por el desencanto del acuerdo alcanzado entre USA-China, el miedo a las consecuencias por la detención de la CFO de Huawei y la inversión de la curva 2y10y de tipos USA, y todo a pesar de haberla iniciado el lunes con grandes alzas por el mencionado acuerdo.
Datos Macro:
Aunque han aparecido indicadores en favor de los mercados de riesgo, estos no han sido considerados al haber sido eclipsados por aspectos geopolíticos de mayor calado. No obstante, es importante que aparezcan datos que reviertan tendencias negativas para sustentar el ciclo económico.
Empezamos la semana conociendo el PMI manufacturero de la zona euro que había subido hasta el 51,8 desde el 59,3 previsto y en USA, el PMI manufacturero del ISM quedó en un excelente 59,3 mostrando un gran dinamismo. El PMI de servicios en la zona euro también resultó ser mejor de lo esperado, ascendiendo hasta el 53,4, mientras que en UK bajó hasta 50,4 pasándole factura la incertidumbre del proceso del Brexit y el PMI de servicios Caixin en China alcanzó en 53,8 muy superior al 50,7 esperado.
En el aspecto negativo, nos encontramos con un dato preocupante, como es la bajada del PIB anual australiano que publicó un crecimiento del 2,8% descendiendo desde el 3,3% esperado. Australia tiene una economía sustentada en las materias primas, y por tanto es el primer paso en el proceso productivo mundial. Al crecer menos de lo esperado, se considera que la demanda de materias primas es menor por una desaceleración económica.
Entre los datos que menos gustaron a los operadores cabe destacar el dato de producción industrial alemán que quedó en -0,5% desde el 0,3% esperado. El informe de creación de empleo USA publicado fue de 155K cuando se esperaba de 200k, que, aunque es negativo, se leyó positivamente al considerar que un enfriamiento del mercado laboral relajaría las pretensiones de subidas de tipos por parte de la FED.
Un dato que se encontrará en multitud de crónicas la semana que viene es el de la balanza comercial de China publicada este sábado. En el informe, se aprecia un superávit comercial de 44.750M$ superior al estimado (34.000M$), algo descontado al haberse sabido que el superávit comercial con USA fue récord esta semana. Cabe destacar que tanto las importaciones como exportaciones descendieron por debajo de lo previsto, mostrando una demanda débil. Las importaciones crecieron un 3% cuando se esperaba un 15% y las exportaciones un 5,4% desde el 10% esperado. No obstante, según refleja Reuters (*1), se puede apreciar que los agentes económicos habían acelerado las importaciones de bienes desde China para evitar pagar aranceles superiores impuestos por la administración Trump, tal y como se puede apreciar en el gráfico, quedando el dato de exportaciones por encima del esperado en periodos previos en promedio.
Fuente datos: National Bureau of Statistics of China
Guerra Comercial Usa-China y el conflicto Huawei:
Cabe destacar que las bolsas mundiales iniciaron las negociaciones el lunes con grandes subidas gracias al acuerdo alcanzado entre China y USA, durante la cumbre del G20, de no incrementar las hostilidades arancelarias. Concretamente, se daban un plazo de 90 días para alcanzar un acuerdo definitivo, periodo en el cual China se comprometía a comprar productos estadounidenses agrícolas y energéticos entre otros. A cambio USA no incrementaría los aranceles del 10% al 25% en enero, tal y como estaba previsto. Ante las buenas intenciones mostradas por ambas partes, los mercados de riesgo no dudaron en aplaudir el acercamiento y siguieron escalando posiciones.
No pasó ni una jornada hasta que empezaron a aparecer informes en los que se plasmaba una gran diferencia entre la efusividad de los medios cercanos a Trump respecto al acuerdo alcanzado y los medios chinos. Estos últimos, mucho más templados y no haciendo referencia a los múltiples compromisos a los que supuestamente se habían comprometido los chinos según medios cercanos a la administración Trump. La sensación que empezó a calar en los operadores fue que el acuerdo era muy poco balanceado, en el que los chinos se comprometían a acatar toda una serie de medidas a cambio de no recibir un arancel del 25% en enero. No obstante, lo que sí confirmaron los chinos es que reiniciarían de inmediato las compras de productos agrícolas y productos energéticos, si se diesen las condiciones logísticas óptimas.
El día 1 de diciembre se detuvo en Canadá a Meng Wanzhou, CFO de Huawei e hija del fundador de la misma, aunque la noticia no se hizo pública hasta esta semana (*2). Se le acusa de fraude y de infringir las sanciones contra el régimen iraní impuestas por parte de USA, ante lo que ha sido requerida su detención para su extradición a USA, donde quieren que sea juzgada por los cargos mencionados. Además, la compañía tecnológica ha sido acusada por parte de varios gobiernos, entre ellos el estadounidense, de incorporar elementos en los dispositivos móviles vendidos para ser empleados en labores de espionaje en favor del gobierno chino, acusaciones que Huawei siempre ha negado.
Si a todo ello le sumamos la filtración de que el padre y fundador de Huawei tiene vínculos a alto nivel con el Partido Comunista chino, tenemos el motivo de la gran preocupación de los mercados financieros, y no es otra que a un conflicto geopolítico que eche por tierra el acercamiento entre China y USA para una resolución comercial. Por ahora el Gobierno chino ha solicitado formalmente explicaciones ante su detención, así como la liberación inmediata de la CFO de Huawei.
Estos dos aspectos comentados, el desencanto ante los términos del acuerdo entre China y USA, una vez han sido analizados en profundidad, y la detención de la directiva de Huawei, han sido dos de los principales motores del desplome de los mercados durante la semana. El tercero fue la preocupación por la evolución de la deuda en USA.
Mercado de deuda USA - Inversión de la Curva & FED:
Durante todo el año hemos sido testigos de múltiples voces que avisaban del aplanamiento de la curva de tipos en USA, era algo que todo el mundo “oía, pero no escuchaba”, hasta esta semana.
Lo habitual en renta fija, es que los bonos que tienen una duración mayor hasta su vencimiento ofrezcan un rendimiento superior a aquellos que tienen una duración menor. Y tiene sentido, ya que al estar un inversor expuesto a plazos mayores, exigirá una rentabilidad superior por ese riesgo incurrido. El problema viene porque actualmente la rentabilidad exigida por un bono de 2 años y otro de 10 años se ha estrechado completamente. La convergencia entre ambos está a punto de llegar a lo que se conoce como inversión de la curva de tipos, lo que implicaría que un bono de 10 años tendría una rentabilidad inferior a un bono de 2 años y la rentabilidad entre el bono 10y y 2y sería negativa.
Fuente datos: Bloomberg
El mercado ha entrado en pánico, al llenarse de informes mostrando estadísticas según las cuales cada vez que los bonos han llegado a la inversión de la curva de tipos entre el 2 y el 10 años, hemos entrado en recesión y las caídas en los mercados de riesgo han sido muy severas.
El Wall Street Journal publicó una noticia (*3) en la que se indicaba que la FED subiría tipos una vez más en diciembre y posteriormente se mantendrían en una postura de analizar la situación antes de volver a actuar sobre ellos. El mensaje fue muy bien acogido por los inversores, que respondieron generando un gran rebote en la sesión del jueves, rebote que posteriormente se esfumaría el viernes ante el nerviosismo generalizado existente.
Petróleo:
Finalmente, el activo energético ha podido tomarse un respiro de las ventas masivas desde máximos y consigue aguantar el soporte de 50$ (WTI), gracias al acuerdo alcanzado entre los miembros de la OPEP y Rusia. Concretamente, los miembros de la OPEP reducirán la producción en 0,8 millones de barriles por día y los No-OPEP en 0,4 M Bpd según Reuters (*4). En virtud del cual, se conseguirá estrechar el excedente de producción que se daba hasta ahora, otorgando soporte a los precios por el lado de la oferta. No obstante, todo queda a expensas de que los miembros hagan honor al pacto y USA no incremente la producción más de lo esperado, puesto que está bombeando a máximo rendimiento. Otro factor que hemos conocido, y que generará inestabilidad en el futuro, es la salida de Qatar de la OPEP con el motivo de no estar sujeta a las cuotas de bombeo.
Europa:
A Theresa May se le complica el Brexit tras la defensa del mismo en el parlamento, y empiezan a aparecer movimientos para realizar un nuevo referéndum en el que se pueda votar la permanencia de UK dentro de la Unión Europea.
El domingo tuvimos elecciones autonómicas en Andalucía y quedó constatado el hartazgo de los ciudadanos en las urnas, con un castigo severo a la izquierda, dando alas a los partidos más conservadores. Todo ello genera un periodo de incertidumbre en la autonomía que no tendría mayor relevancia para los operadores, a menos que se tome en clave nacional y ahí sí que los mercados requieren de estabilidad, por lo que estarán muy atentos a los pactos que se constituyan.
Conclusiones:
Durante la próxima semana, resultará vital hacer un seguimiento del caso Huawei y esperar que no escale en un conflicto geopolítico que ponga en dificultades a las negociaciones comerciales entre China y USA, en cuyo caso las bolsas se verían muy penalizadas. En cambio, si apreciásemos noticias conforme los chinos reanudan la importación de productos estadounidenses, lo veríamos como un gran progreso de cara a negociaciones comerciales y los mercados lo aplaudirían con alzas en los activos de riesgo.
Los operadores vigilarán la posible inversión de la curva de tipos entre la rentabilidad de los bonos a 2 y 10 años. En caso de que se acercase al punto cero, no tengamos duda que se generarían ventas agresivas y cualquier respiro en el spread, ampliándose, daría margen a los mercados para recuperar posiciones y relajar la alta sobreventa actual.
Dada la gran incertidumbre ante los puntos expuestos, parece que el Brexit ha pasado a un segundo plano por parte de los agentes económicos. Sin embargo, una complicación podría desembocar en un nuevo referéndum de permanencia, que en caso de suceder podría girar la situación tornándose positiva.
En España, estaremos pendientes a los acuerdos que se puedan derivar para alcanzar la Presidencia de Andalucía, puesto que se exportaría de cara a unas hipotéticas elecciones generales y determinaría la estabilidad esperada para los mercados a futuro.
En resumen, nos encontramos en una situación compleja y tremendamente delicada, donde los nervios están a flor de piel y muchos operadores tienen el dedo sobre el botón de vender, que presionarán a la menor señal. Al decir operadores, también hacemos referencia a las máquinas de alta frecuencia (HFT), consistentes en algoritmos de trading automáticos que basan su toma de decisiones en datos objetivos y ratios para operar en el mercado de forma autónoma. Al no disponer de aspectos psicológicos humanos, no dudarán en vender por muy bajo que sea el precio de los activos en caso de que las condiciones económicas muestren deterioro.
(*1) China's November export, import growth shrinks, showing weak demand
(*2) Top Huawei executive arrested on U.S. request, clouding China trade truce
(*3) Fed Weighs Wait-and-See Approach on Future Rate Increases
(*4) OPEC, Russia agree to slash oil output despite Trump pressure
Twitter: @ivanftoril