Es raro que escriba de bolsa en mi blog, porque de ello entiendo exactamente un borrajo. De lo que si entiendo algo (creo) es de contabilidad y estados financieros, en este sentido lo que ha ocurrido con la banca en estos últimos años no es normal. Primero porque el negocio bancario está organizado sobre la base de la intermediación con el dinero, por decirlo de algún modo, “se compra” dinero a depositantes a un precio, y “se vende” tal dinero a clientes de crédito, préstamo y financiaciones a uno de superior, entonces, sobre la diferencia de precios entre “compra” y “venta”, en margen, se estructura todo el negocio de estas empresa, si bien a ello hay que incluir los fondos propios de la empresa (el capital y reservas) que también se puede “vender” en parte, lo que no se precisa para financiar todo el inmovilizado de la empresa (edificios, maquinaria, instalaciones, equipos de procesos de información, etc.).
En segundo lugar, hay que decir que desde hace unos años, yo diría que de antes de los años 90, la simpleza del negocio de “comprar” a depositantes, “vender” a acreditados/as, prestatarios/as, etc. y percibir unas pocas comisiones de servicios como en operaciones internacionales, avales, comisiones por concesión de préstamos, crédito y todo tipo de financiaciones, pero el resto de los servicios prácticamente gratuito y remunerado únicamente de manera intrínseca por el propio rendimiento que se obtenía de los depósitos, empezó a cambiar de forma sustancial con la aparición de fondos de inversión, que generan comisiones, la percepción de otras comisiones y cobro de servicios de todo tipo ante la constante bajada de los tipos de interés, paulatinamente eliminado la gratuidad de cuentas o mantenerlas de aquel modo, pero limitando las mismas al cumplimientos de varios requisitos, las comisiones de seguros, etc.
Desde finales de 2008 que los tipos de interés empezaron a bajar llegando a estar en negativo, todo “el montaje” bancario histórico se va literalmente al cuerno, el margen entre “compra” y “venta” se empieza a reducir, porque cuando los depósitos están en el 0% no se pueden liquidar intereses negativos a los clientes para mantener tal margen. Empezaron a cobrar por los depósitos a grandes cuentas y algún banco lo intentó para saldos por encima de 30.000 €, sin embargo eso no sería el grueso de los depósitos, al final “el menudeo” supongo que tendría unos importes muy elevados y sin cobrar esto con tipos negativos, las cuentas de los bancos tenían un lastre importante.
A todos nos puede chocar ver que por ejemplo el Banco Santander tiene unos resultados de 7.316 millones de euros en los primeros 9 meses de 2022 https://www.santander.com/content/dam/santander-com/es/documentos/resultados-trimestrales/2022/3t/rt-3t-2022-presentacion-resultados-banco-santander-es.pdf o que en BBVA sean 4.842 millones https://elpais.com/economia/2022-10-28/el-bbva-gana-4842-millones-hasta-septiembre-un-46-mas-pese-al-ajuste-de-su-filial-turca-garanti.html obviamente es una cantidad ingente de dinero y hasta difícil tener claro los ceros que hay que poner detrás para llegar a la cifra, no obstante, el problema que al parecer nadie considera, las noticias de prensa los primeros que lo obvian ¿Comprado con qué? Pues será con la capitalización del banco ¿o no?
A ver, los socios (accionistas) tiene ahí una inversión para rentabilizarla, si, claro, como todo Cristo ¿o no? Y tal inversión es la suma del capital y las reservas del banco ¿cierto? Con lo cual cuando compramos los resultados con tal capitalización que es elevadísima, unos 125.000 millones de euros en el Santander (si, ciento veinte y cinco mil millones de euros) y en BBVA 63.000 millones de euros (sesenta y tres mil millones).
Entonces cuando ponemos la comparativa de los resultados contra la capitalización, nos encontramos que salvo Bankinter (*), la rentabilidad de casi todos los bancos (son todos) es baja comprada con casi cualquier gran empresa. Si, es cierto las cantidades absolutas son elevadísimas, pero cuando desgranamos sobre el que, resulta que el negocio bancario, en estos últimos años, no ha sido ni de lejos muy apetecible para los inversores estables, hay montones de empresas donde invertir en las que la rentabilidad de capital gana a la banca, y algunos negocios por como se diría en ámbito deportivo, por goleada.
(*) De alguna manera Bankinter no fue nunca un banco al efecto, uno de estándar, centrado siempre en pocas oficinas, ciudades importantes, bajo nivel de gasto, y primando la rentabilidad antes que el crecimiento (o eso parece). Con lo cual ha sufrido mucho menos en estos años.
Con tales tipos negativos, la banca ha tenido que reinventarse, cerrar oficinas, reducir gastos de todo tipo, centrar su negocio para que las comisiones sean un foco importante de ingresos, estandarizar, mecanizar, etc.
Pero esta larga caminata de tipos negativos provocó algo que no por ser la tónica en banca, deba considerarse normal, que el valor en bolsa de una entidad financiera no llegue a la capitalización del banco, si alguien comprase todas las acciones, pagaría por ellas bastante menos de lo que vale la empresa en términos contables, algo que no por haber sido lo habitual en estos últimos, deja de ser muy, muy raro o extraordinario.
Pero esta larga caminata de tipos negativos provocó algo que no por ser la tónica en banca, deba considerarse normal, que el valor en bolsa de una entidad financiera no llegue a la capitalización del banco, si alguien comprase todas las acciones, pagaría por ellas bastante menos de lo que vale la empresa en términos contables, algo que no por haber sido lo habitual en estos últimos, deja de ser muy, muy raro o extraordinario.
En el momento en que los tipos de interés empiezan a subir, y para esto no hacia falta que llegasen al 3%, con el 1 o 2% hubiera ocurrido casi lo mismo, el negocio bancario vuelva a funcionar correctamente, y no solo eso, ya que con los ahorros de gastos de los últimos años y el empuje de las comisiones a las que todos (con pataletas o sin ellas) hemos acabado considerando como normalidad y dudo que ahora se vayan a eliminar o reducir de forma relevante, las cotizaciones bancarias se ponen a subir y tal como indica la noticia, acercándose ya a unas cotizaciones cercanas al valor teórico contable de las entidades financieras.
¿Porqué? Con tipos positivos, las perspectivas de consecución de resultados más acordes con el nivel de inversión toman forma, para mi es así de simple. Y además que tal rentabilidad sea comparativa con otros negocios, que ahora no es
¿Porqué? Con tipos positivos, las perspectivas de consecución de resultados más acordes con el nivel de inversión toman forma, para mi es así de simple. Y además que tal rentabilidad sea comparativa con otros negocios, que ahora no es
Pero tiene pinta de mantenerse en el tiempo, porque aunque tras un par de subidas más de tipo oficial como parece “cocinarse” en el Banco Central Europeo, en un intento de reducir la inflación, aunque luego bajen un poco, la banca se comportaría igual de bien con tipos al 4 que al 2%, el problema lo tiene con tipos negativos o al cero coma algo, no al uno y medio o dos.
¿Entonces, entiendo que invertir en banca puede ser bueno? No es algo tan sencillo, si como hace décadas la bolsa se moviera solo por las cuentas de una empresa y sus perspectivas de negocio, claro que lo seria, pero hace años que no funciona así, o mejor dicho, la sanidad de un balance empresarial, es solo uno de los datos que toman los inversores, los que tiene vocación de permanecer a largo plazo también, solo uno de los datos, con lo cual no siempre las perspectivas futuras de rentabilidad suponen un aumento de cotización o lo contrario. Por tanto, no recomiendo invertir en bancos, ni tampoco lo contrario, simplemente porque solo por tales perspectivas futuras de incremento de rentabilidad, nadie nos garantiza que la cotización se mantenga o suba.
¿Entonces, entiendo que invertir en banca puede ser bueno? No es algo tan sencillo, si como hace décadas la bolsa se moviera solo por las cuentas de una empresa y sus perspectivas de negocio, claro que lo seria, pero hace años que no funciona así, o mejor dicho, la sanidad de un balance empresarial, es solo uno de los datos que toman los inversores, los que tiene vocación de permanecer a largo plazo también, solo uno de los datos, con lo cual no siempre las perspectivas futuras de rentabilidad suponen un aumento de cotización o lo contrario. Por tanto, no recomiendo invertir en bancos, ni tampoco lo contrario, simplemente porque solo por tales perspectivas futuras de incremento de rentabilidad, nadie nos garantiza que la cotización se mantenga o suba.
Un dato, el 26 de octubre el Santander anuncia beneficios récord en los primeros nueve meses del año https://cincodias.elpais.com/cincodias/2022/10/26/companias/1666760195_917267.html
Y su cotización bursátil cae !!!