La idea central de este post es muy simple. La eólica ha sido la primera fuente de electricidad en España a lo largo de 2013.
En realidad se trata sólo de la España Peninsular, excluídos Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla. pero puesto que en los sistemas extrapeninsulares se tiene sobre todo generación por fuel/gas además de eólica, la suma total de todos los sistemas, peninsular y extrapeninsular, arrojaría un indiscutible resultado de liderazgo para la eólica para 2013.
Fuente: REE.
Se veía venir debido a la evolución de los últimos años. A pesar de que el régimen especial fue defenestrado por el actual gobierno y de que no se instala nueva potencia eólica, los parques eólicos cada vez están mejor gestionados, los problemas de la red cada vez se solventan mejor y REE, hay que reconocerlo, está haciendo un magnífico trabajo en la integración de electricidad de origen renovable en la red.
Continuamente se baten récords de inyección eólica en la red. El último ocurrió el día de Navidad. Con una potencia instalada de poco más de 23.000 MW hubo momentos en que dos tercios de la electricidad consumida en la Península fueron de origen eólico. También ha habido días en que se han tocado los 17.000 MW eólicos.
Fuente: energiasrenovables.com
Así las cosas, la evolución de la penetración de la energía eólica en la red eléctrica peninsular queda con una bonita tendencia... que pronto quedará cortada en seco.
Esto es lo que se ve. Ahora hablemos de lo que no se ve.
No se ve por ejemplo que la tasa de desperdicio de energía primaria, o dicho de otra forma, la energía eólica tirada por restricciones de red, no llega al 1%. Expertos que en su día trabajaron en REE suponen que en 2020 podría llegar al 3,6%, lo que es una nimiedad en realidad teniendo en cuenta que son muchos los días queel viento nos surte de la mitad de la electricidad en la Península.
Tampoco se ve de forma muy evidente que mientras la eólica sopla mucho España tiene una mayor necesidad de exportar electricidad. Hoy por hoy España es una isla eléctrica y necesita urgentemente de mejores interconexiones con Europa. A pesar de los pesares, en 2020 España seguirá en el vagón de cola de la interconexión europea, por debajo del 10% recomendado, actualmente el 1,2%. Sí amigos, España nunca ha dependido de la nuclear francesa como ya vimos en un post rebatiendo este bonito mantra nuclear. Pero sería bonito, y muy recomendable para todos, que algún día Francia dependiera un poco más de nosotros y nosotros de ella.
Cuando la eólica es poderosa y la demanda de electricidad mínima, vemos en el gráfico que se trata de almacenar energía en forma de bombeo hidráulico. Pero los más de 3.000 MW existentes no son suficientes. REE tiene planes para doblar esta potencia para 2020. Una mayor penetración de las renovables, si el gobierno de turno no se empeña en poner piedras y pedrolos por el camino, necesitará de un mayor y más gestionable almacenamiento.
Hay otras formas de almacenar energía eléctrica y una de las favoritas de los operadores de los sistemas eléctricos es el vehículo eléctrico. Algún día esta forma de movilidad será una realidad, más que una excepción, de hecho ya es una realidad en muchos países que lo ven como una oportunidad de estabilizar la red y dotarla de capacidad de almacenamiento adicional a los sistemas ya instalados.
Hoy día, y a pesar de la oposición de una oligarquía empeñada en perpetuar un modelo energético caduco, España es un referente en energía eólica. A pesar de no ocupar ni el 1% de la superficie mundial, es el cuarto país con más potencia instalada en el mundo, por detrás de gigantes de la talla de China, Estados Unidos y Alemania. Sólo la muy ventosa Dinamarca posee mayor penetración de la energía eólica en el sistema eléctrico que España.
No somos los números uno en potencia, ni tampoco los que más producimos, pero sí somos los que mejor integramos nuestros esfuerzos, mérito del operador de la red y otros muchos agentes. Y no lo digo yo, sino la Agencia Internacional de la Energía.
Why the policy is considered a success
The introduction of large-scale renewablee nergy technologies in the Spanish power system has not been the source of any incidents affecting consumers, and the necessary supply security has always been preserved. The number and severity of imbalances between generation and demand have also remained very low, similar to levels ten years ago, thus indicating the stability of the system.