En el año de 1985 el Premio Nobel de Economía es para el gran economista italo-estadounidense Franco Modigliani (18 de junio 1918, Roma, Italia; 25 de septiembre 2003, Cambridge, Massachusetts, Estados Unidos). Como otros científicos y Premios Nobel de diversos campos, la gran conflagración de la II Guerra Mundial y la barbarie nazi marcó su vida, en su caso concreto tanto por sus orígenes judíos como por sus valores y creencias democráticas, tolerantes y pacifistas, por lo que tuvo que abandonar su país y emigrar a Estados Unidos. De sólida formación humanista y jurídica su enfoque hacia la economía fue ya al otro lado del Pacífico, sobre todo en diversas universidades como la de Columbia, Illinois y sobre todo finalmente en el Departamento de Economía del Instituto Tecnológico de Massachusetts, el mítico M.I.T.
Ha marcado y sigue marcando buena parte de las Ciencias Económicas y Empresariales por sus innumerables contribuciones y originalidades al desarrollo de este campo científico y profesional. Concretamente, por lo referido a las vinculaciones entre renta, consumo y ahorro, tanto a nivel individual como social, a partir de las ideas de Keynes, así como por formulaciones y enfoques novedosos en el terreno de los mercados financieros y las empresas. Se le considera artífice o al menos partícipe cofundador o generador de hipótesis muy relevantes como la del ciclo de vida y las expectativas racionales.
Desde mi punto de vista, la mayor originalidad de Franco Modigliani, que junto con Merton Miller Premio Nobel compartido en 1990 con Harry Markowitz y William Sharpe, formuló sus famosos e inicialmente polémicos teoremas Modigliani-Miller, que conocieron diversas versiones, depuraciones y perfeccionamientos, es la integración de la Teoría Económica y en especial de la Macroeconomía con un enfoque práctico y operativo aplicado al mundo profesional de la empresa y las Finanzas en el sentido de su mayor cometido y objeto, es decir las decisiones de inversión y financiación así como políticas financieras interrelacionadas.
Todo ello aplicado concretamente a decisiones de endeudamiento, política de dividendos, repercusiones en el coste de capital análisis de inversiones, valor de la empresa y muchas otras. Inicialmente señalando la irrelevancia de la estructura financiera y decisiones de endeudamiento en el valor de la empresa pero finalmente al incorporar variables fiscales y riesgos financieros cambiando sustancialmente conclusiones validadas por análisis empíricos. Los seguidores y discípulos de Franco Modigliani son innumerables y quizás destaca Robert J. Shiller, Premio Nobel compartido en 2013 con Eugene F. Fama y Lars Peter Hansen, que evaluó y pronosticó con bastante antelación la burbuja inmobiliaria y la gran crisis global que comienza en 2008 con señales ya muy claras en 2007 e incluso en 2006.
Luis Ferruz / Escritor y economista
Ha marcado y sigue marcando buena parte de las Ciencias Económicas y Empresariales por sus innumerables contribuciones y originalidades al desarrollo de este campo científico y profesional. Concretamente, por lo referido a las vinculaciones entre renta, consumo y ahorro, tanto a nivel individual como social, a partir de las ideas de Keynes, así como por formulaciones y enfoques novedosos en el terreno de los mercados financieros y las empresas. Se le considera artífice o al menos partícipe cofundador o generador de hipótesis muy relevantes como la del ciclo de vida y las expectativas racionales.
Desde mi punto de vista, la mayor originalidad de Franco Modigliani, que junto con Merton Miller Premio Nobel compartido en 1990 con Harry Markowitz y William Sharpe, formuló sus famosos e inicialmente polémicos teoremas Modigliani-Miller, que conocieron diversas versiones, depuraciones y perfeccionamientos, es la integración de la Teoría Económica y en especial de la Macroeconomía con un enfoque práctico y operativo aplicado al mundo profesional de la empresa y las Finanzas en el sentido de su mayor cometido y objeto, es decir las decisiones de inversión y financiación así como políticas financieras interrelacionadas.
Todo ello aplicado concretamente a decisiones de endeudamiento, política de dividendos, repercusiones en el coste de capital análisis de inversiones, valor de la empresa y muchas otras. Inicialmente señalando la irrelevancia de la estructura financiera y decisiones de endeudamiento en el valor de la empresa pero finalmente al incorporar variables fiscales y riesgos financieros cambiando sustancialmente conclusiones validadas por análisis empíricos. Los seguidores y discípulos de Franco Modigliani son innumerables y quizás destaca Robert J. Shiller, Premio Nobel compartido en 2013 con Eugene F. Fama y Lars Peter Hansen, que evaluó y pronosticó con bastante antelación la burbuja inmobiliaria y la gran crisis global que comienza en 2008 con señales ya muy claras en 2007 e incluso en 2006.
Luis Ferruz / Escritor y economista