Dos de los mercados que todo el mundo ve como excesivos en relación al precio que se pagan por sus activos son los del arte y los del fútbol.
Compra-ventas millonarias de futbolistas y de obras de arte acaparan regularmente las portadas de los diarios y son comentadas en todos los telediarios.
En el caso del arte las dos pinturas más caras jamás vendidas siguen siendo superiores al traspaso más caro en la historia del fútbol.
El cuadro Salvator Mundi, de 45x66 cms, del genio renacentista italiano Leonardo da Vinci, ostenta el récord con un valor de venta de 382,1 millones de euros. Fue adquirido por un comprado anónimo en noviembre de 2017 en una subasta de la prestigiosa Christie's.
El segundo lugar lo ocupa un cuadro de uno de los mayores exponentes del Expresionismo abstracto, el holandés Willem de Kooning, con la obra Interchange, realizada en 1955 y comprada en 2015 por el inversor Kenneth Griffin por valor de 264,8 millones de euros.
Ambos superan la compra-venta más cara hasta la fecha de un futbolista, la de Neymar, comprado por el PSG al FC Barcelona por 222 millones de euros en verano de 2017.
El tercer lugar del podio lo ocupa un cuadro del pintor post-impesionista francés Paul Cezanne, con la obra Los jugadores de cartas, comprado por la familia real de Qatar en 2011 por un valor de 191,6 millones de euros.
El genio español Picasso ocupa la sexta posición con el cuadro Les femmes d'Alger, realizado en 1955 y vendido en 2015 a un comprador anónimo por valor de 160,2 millones de euros.
Por influencia familiar siempre he estado relacionado de una u otra manera con el mundo del arte. Hace año y medio empecé a hacer exposiciones y de momento los precios de mis obras están a años luz de la de los grandes maestros de la historia de la pintura pero creo que en general por lo que he podido comprobar gustan y tienen precios asequibles.
