Hemos vivido muy bien. Era todo mentira, pero que nos quiten lo bailado. Desde 1972, el sistema financiero mundial entró en una nueva fase explosiva. La potestad de los BC de emitir tanto dinero como fuera necesario, ha permitido elevar el nivel de vida, salir de la pobreza, mejorar la calidad de...
Decía el legendario inversor Sir John Templeton que los mercados alcistas nacen en el pesimismo, crecen en el escepticismo, maduran en el optimismo y mueren en la euforia. La fase final en este mercado eternamente alcista es el equivalente a morir de éxito, por cortesía de los Bancos Centrales.
El 18-Diciembre posteaba el último informe del artículo "2020. El mayor crash de la historia". Lo que antes era una mera predicción, ahora tiene otra perspectiva más real. Puede que se quede en nada o puede que se cumpla, pero el susto ya no nos lo quita nadie.
Ante las innumerables muestras de personas que confían ciegamente en las autoridades , como garantes y referentes del exquisito cuidado en evitar la llegada de una grave crisis, me gustaría comentar algo sobre la inevitabilidad de impedir que explote una burbuja que lleva largo tiempo gestándose.