Hemos llegado al final de la temporada de resultados, correspondientes al primer trimestre del 2015, y el sentimiento común en Wall Street es que las cosas resultaron mucho mejor de lo esperado. Las perspectivas al inicio del periodo de reportes financieros eran sumamente negativas, pues buena parte de los inversores auguraba el fin de la tendencia alcista en el mercado bursátil, una vez se relajaran los programas de flexibilización monetaria implementados por la Fed y el BCE. En cambio, la continua apreciación del dólar frente a monedas como la libra esterlina, el euro y el yuan, acabó por demorar el proceso de recuperación económica de EE.UU., tal y como lo demuestran los últimos informes sobre empleo, volumen de manufactura y patrones de consumo, entre otros. Por su parte, la Unión Europea sigue temiendo al fantasma de la deflación, razón por la cual ha anunciado la extensión de su programa de compra de bonos “tanto tiempo como sea necesario”. Asimismo, las autoridades monetarias a ambos lados del Atlántico han decidido mantener los tipos de interés en valores cercanos a cero, hasta tanto sea patente que la economía sigue el curso deseado.
En este contexto tan particular el sector tecnológico de la bolsa demostró todo su potencial. El índice Nasdaq se mantuvo al alza durante todo el trimestre, fijando nuevos records en jornadas consecutivas el 23 y 24 de Abril. Esto dejaba el máximo histórico del índice tecnológico en 5.092,08 puntos, un techo que curiosamente fue superado al cierre de estas líneas, momento en que el Nasdaq elevó su cotización hasta los 5.106,59 puntos.
Las continuas subidas del sector tecnológico han generado cierta euforia en torno a algunas compañías, y el caso más representativo probablemente sea Netflix. La firma de streaming es el activo de moda entre los inversores debido a la impresionante capacidad de crecimiento que ha mostrado el servicio. De acuerdo con sondeos privados la compañía mantiene una penetración de mercado del 40% en los EE.UU. y avanza rápidamente en adopción. Pero el verdadero potencial del negocio se encuentra en el mercado internacional, del cual se estima que posee seis veces más clientes que el mercado estadounidense, y podría valer el doble. De allí que la firma haya decidido cuadruplicar su presencia internacional para finales del año próximo, con lo cual colocaría su marca en alrededor de 200 países. Dichas proyecciones han hecho la delicia de los analistas de FBR Capital Markets, que en una decisión ultra-optimista han fijado el nuevo precio objetivo de la acción en 900 dólares.
Amazon: perspectivas de resultados
Otra compañía que culmina el trimestre con muy buenas perspectivas es Amazon. La empresa de comercio electrónico presentó durante el periodo el primer reporte detallado de las operaciones de su negocio en la nube, Amazon Web Services (AWS), algo a lo que ninguna compañía con una oferta de nube pública se había atrevido hasta entonces. Consiguientemente, el reporte de Amazon se convirtió en el barómetro según el cual se mediría al resto de las firmas, y el listón fue dejado bastante alto. AWS representa tan solo el 8% de la facturación total de Amazon, pero con un crecimiento anual del 49% y 1.570 millones de dólares recaudados, la división aportó el 60% de los beneficios operativos totales de Amazon. Además coloca a la firma por delante de competidores de la talla de IBM, Microsoft, Salesforce y Google en términos de facturación por servicios cloud. Esto fue suficiente para que la cotización de Amazon ganara más de 14% en la sesión posterior a su reporte de resultados, con lo cual fue uno de los artífices del record que establecía el Nasdaq ese jueves 23 de Abril.
Apple: Astronómicas cifras reportadas
Pero nada fue tan impresionante como las astronómicas cifras reportadas por Apple durante el trimestre. La compañía de la manzana comenzó el 2015 con 58.010 millones de dólares en ventas y 13.570 millones de dólares en beneficios, y todo ello gracias a la increíble popularidad del iPhone 6 y el iPhone 6 Plus. La firma californiana vendió 61,2 millones de smartphones en los primeros tres meses del año, lo cual significa que su facturación crece un 24% más rápido que el promedio de la industria de teléfonos inteligentes. Y es que la última versión del terminal ha sido tan bien recibida que en tan solo seis meses se han vendido 135,6 millones de iPhones, lo cual está apenas 34 millones de unidades por debajo del total facturado durante todo el 2014. La facturación del iPhone es particularmente alta en la Gran China -subconjunto que engloba a China, Hong Kong y Taiwan-, región que generó ingresos por el orden de los 16.800 millones de dólares, convirtiéndose en el segundo mercado en volumen de ventas por detrás de los Estados Unidos. Pero no todo son buenas noticias, pues ya comienzan a surgir proyecciones que indican que las ventas del Smartphone de Apple han rozado su máximo y en adelante solo pueden disminuir, lo cual presionará a la baja los ingresos del año fiscal 2016.
¿Qué es del negocio de semiconductores?
Si de malas noticias se trata, es necesario hablar del negocio de semiconductores, pues investigaciones de mercado estiman que este segmento tenderá a ralentizarse este año de la mano con la caída en las ventas de ordenadores. Recordemos que los PC’s están siendo desplazados en las preferencias del público por las tablets y teléfonos inteligentes, lo cual ha impactado de manera directa a los fabricantes de ordenadores y, de manera indirecta, a los fabricantes de procesadores, que se han visto en la necesidad de innovar para ingresar a nuevos nichos de mercado. Tal es el caso de Texas Instruments y su oferta para el sector automotriz, o Nvidia y su apuesta por dominar el mercado de procesadores gráficos de alto rendimiento. Entretanto firmas como AMD, cuyas ventas trimestrales cayeron más de 25% anualmente, parecen quedarse rezagadas ante las nuevas tendencias y con cada día de inacción se alejan un poco más de la competencia.
Situación de Lenovo
Una compañía aparentemente inmune a la baja en el segmento de ordenadores es Lenovo, que continua imparable en su dominio del mismo, liderando por segundo año consecutivo las ventas mundiales de este apartado. La empresa china vendió 13,3 millones de PC’s este trimestre, lo cual la deja con un 19,5% de participación en este mercado. Pero no conforme con ello también se cuenta entre los líderes en los segmentos de tablets, con 12 millones de unidades vendidas, y smartphones, donde ocupa el tercer lugar por detrás de Samsung y Apple, con 18,7 millones de unidades facturadas. Y como si el hardware no fuera suficiente, ya existe el anuncio oficial de que próximamente estará presentando una oferta de software que le permita complementar su línea de productos.
Mientras tanto, trascendiendo al hardware y al software, encontramos a un segmento al alza, y este es el de publicidad digital. El mercado publicitario ha cambiado significativamente a medida que el uso de dispositivos móviles se ha generalizado entre los consumidores. Esto ha obligado a firmas como Google -cuya fortaleza se haya en las impresiones publicitarias en ordenadores de sobremesa- a desarrollar alternativas que le permitan retener su posición dominante en el segmento. Entre las iniciativas tomadas por el motor de búsquedas se encuentran cambios recientes a su algoritmo de resultados para recompensar a las páginas adaptadas a la navegación móvil, al tiempo que obliga al resto a adecuarse. Con ello la empresa espera convertir a su sitio en una herramienta más amigable a los dispositivos móviles e incrementar el tiempo de navegación en el mismo. Otro de sus puntos fuertes es la monetización del servicio de videos Youtube, que aunque recauda un menor coste por clic, posee la ventaja de contar con millones de visualizaciones al mes, lo cual se traduce en millones de oportunidades para mostrar publicidad.
Google no puede confiarse en su potencial
Sin embargo Google no puede confiarse en su potencial, pues ya le sigue de cerca los pasos Facebook. Esta última cuenta con 1.440 millones de usuarios en su red social, 800 millones de usuarios en WhatsApp, 600 millones de usuarios en Messenger y más de 300 millones de usuarios en Instagram. Dichas fuentes en su mayoría se encuentran sub-explotadas, ya que de momento no incluyen publicidad alguna -con excepción del sitio matriz y la aplicación de la red social-, pero en cambio dejan a Facebook en una posición ideal para monetizar el mercado de publicidad móvil, en el cual es mucho más fuerte que cualquiera de sus rivales.
Linkedin y Twitter sufrieron un trimestre catastrófico
Tomemos por ejemplo el caso de LinkedIn o Twitter, las cuales sufrieron un trimestre catastrófico al mostrarse incapaces de capitalizar las oportunidades publicitarias que reviste su amplia base de usuarios. Así, la primera acabó con un desplome del 19% en su cotización tras reportar sus decepcionantes resultados trimestrales. Esta es la mayor caída en el valor de su acción desde que la compañía se hizo pública hace cuatro años, y significó la pérdida de 6.000 millones de dólares en capitalización de mercado. Por su parte, Twitter no quiso ser menos, y perdió un 18% en su cotización en apenas media hora de operaciones al sufrir una filtración de su pésimo reporte trimestral, el cual luego fue confirmado por la firma. Esa fue la segunda mayor caída en la historia de Twitter desde que sus acciones salieron a la bolsa.
Y aún existe mucho más que contar con relación a un trimestre que fue sumamente interesante, y no cesó de ofrecernos sorpresas tanto positivas como negativas, cuyo detalle podéis encontrar en nuestra web.