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De nuevo las tasaciones de la AEAT

El caso es que no se por qué me habré interesado en esta Adjudicación Directa de Hacienda, a mí, que me gustan tan poco. Quizá sea por cierta afición marinera que me queda tras las tropecientas novelas juveniles de piratas y de aventuras en el mar que leí hace mil años. Pero lo cierto es que esta subasta llamó mi atención y la investigué un poco.

Se trata de un puesto de atraque de 12x4 metros cuadrados situado en el Puerto Deportivo de Fuengirola que ha sido tasado en unos setenta y nueve mil euros.  Pero no he ido mucho más allá de dos o tres minutos de investigación pues en seguida me he topado con esta web en la que se anuncian varios amarres a la venta.

¿Será posible el desatino de estos cretinos que no saben hacer su trabajo y que siempre tasan invariablemente triplicando el valor de los inmuebles que sacan a subasta?

Y ahí me quedo.

 

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  1. en respuesta a Andresgmendoza
    -
    Top 100
    #23
    25/07/13 10:48

    Estoy de acuerdo, pero tu eres una gota en el océano. Lo que más abunda es lo contrario.

  2. en respuesta a Tristán el subastero
    -
    #22
    25/07/13 10:46

    Chico, yo trato hacer las cosas bien. Y de hecho las hago con valores testigos de ventas REALES realizadas (nada de hacerlas con precios de oferta) y creo que saco precios reales.
    Otro tema es que yo haga la tasación en Enero y la subasta sea en noviembre, que el mercado ya no es el mismo.

  3. en respuesta a Tristán el subastero
    -
    #21
    24/07/13 23:40

    Es cierto que una ejecución hipotecaria tiene la máxima fuerza ejecutiva posible, lo que da mucha garantía al adjudicatario. En ese sentido, es cierto que no hay temor a tercerías en ese caso. Pero lo que más temo de las subastas judiciales es la velocidad de tortuga de la mayoría de los juzgados, así como la desidia de muchos de sus funcionarios. Por no hablar de la nefasta publicidad de sus subastas, con tablones-pocilga y expedientes vetados para los subasteros. Por supuesto que en mi caso el temor a encontrarme a subasteros no existe; es más, cuando me los he encontrado, el intercambio de experiencias siempre ha sido gratificante.


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