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La importancia de la psicología en los mercados financieros (Cuarta Parte)

Seguimos con los artículos de sobre Psicología en el trading resultado de transcribir mi presentación de Psicología de Mercados y Behavioral Finance en el Curso de Bolsa por Navidad que impartimos el pasado diciembre. Puedes encontrar la primera parte en este link , la segunda en este otro y la tercera aquí.

 

 

Mostrábamos el otro día lo mal que se nos da la probabilidad. Lo curioso es que aunque se nos de fatal, hacemos nuestras cábalas en base a cálculos equivocados. Por ejemplo, en la siguiente diapositiva, se hace una pregunta inspirada en otro estudio de Kahneman y Tversky:

 

La mayoría de la gente suele responder la opción B. Pero lo cierto es que si no sabes más datos, lo más probable es la respuesta A, porque la B implica que se den dos hechos.

Esto es, que la probabilidad de A (Jim es asesor financiero) es superior a la de A y B (Jim es asesor financiero y entrenador de beisbol). En probabilidad, la posibilidad de que los eventos A y B sucedan al mismo es siempre inferior a la de que suceda sólo uno de ellos.

Esto es lo que se conoce como sesgo de representatividad: Basados en la creencia de que el pasado no cambiará, catalogamos la nueva información como perteneciente a una determinada categoría.

En mercados financieros, por ejemplo, podríamos catalogar una empresa como “growth” porque históricamente así ha sido, sin tener en cuenta que quizá haya entrado en una fase de estabilización del crecimiento de los beneficios.

Este sesgo se acentúa además cuando se mezcla con el sesgo de Encuadre (Framing Bias): las decisiones que tomamos suelen estar influidas por cómo nos han presentado la información, o cómo ha sido formulada la pregunta.

Un ejemplo del sesgo de encuadre que además cuadra bien con la prospect theory: si una acción cotiza a 50 EUR y fue comprada por 40 EUR, el inversor suele estar más dispuesto a vender. Pero si el precio de cierre anterior fue de 60 EUR, será más reacio a vender.

O visto de otra manera que quizá se entienda mejor:

Imagina que tienes que elegir entre estas opciones:

  1. Perder -800 USD con seguridad.
  2. 50% posibilidades de perder 0.

50% posibilidades de perder -1.600 USD.

Normalmente la gente suele elegir la opción b, mostrando el sesgo de aversión a la pérdida que comentamos  en la tercera entrega (porque en realidad ambas opciones tienen la misma esperanza matemática).

Sin embargo, cuando la pregunta se replantea del siguiente modo:

Tienes que elegir entre estas opciones:

  1. Ganar +800 USD con seguridad.
  2. 50% posibilidades de ganar 0.

50% posibilidades de ganar +1.600 USD.

Mucha gente elegirá la opción a. Es decir, que mostrando el mismo ejercicio como una ganancia en vez de como una pérdida, el proceso mental lleva a caminos distintos. Esto no tiene mucho de lógica, pero sí mucho de Homer.

Otro sesgo, relacionado, es el sesgo de disponibilidad, del que hablamos aquí: damos mayor peso a los eventos más recientes o representativos. Así, ponderamos que la probabilidad de que ocurra un evento será mayor cuando sea más familiar o más sencillo de entender.

Por ejemplo, ¿qué es más probable, que te ataque un tiburón o que te caiga encima un meteorito? Los que habéis seguido esta serie de artículos ya sabréis que es una pregunta trampa. Para los demás, aunque la mayoría de gente suele pensar que morir por un ataque de tiburón es algo probable, lo cierto es que sólo hay 1 probabilidad entre 11,5 millones de que ocurre, frente a 1 sobre 75 mil de que te caiga encima un meteorito, según la NASA. De hecho, la probabilidad es que te ataque un tiburón es incluso más baja que la de que te caigan dos rayos encima, que es de 1 entre 9 millones. Eso sí, es más probable que te ataque un tiburón que ser astronauta.

 

Hablando en términos de mercados financieros, cuándo crees que hay mejores resultados en el S&P 500, ¿con gobiernos demócratas o republicanos? O ¿quién aumenta más el déficit público en Estados Unidos, los demócratas o los republicanos? Lo cierto es que aunque se piense que los republicanos son más promercado y antidéficit, la renta variable estadounidense lo hace mejor con demócratas, que en general en los últimos años han reducido el déficit público durante sus legislaturas.

 

Tanto el sesgo de disponibilidad como el de representatividad están muy relacionados con el sesgo más rockero, el de Status Quo.

 

Esta trampa mental nos induce a no tener en cuenta el impacto de nuevas evidencias si estas no son representativas.

Todas estas trampas, en bolsa, nos llevan a categorizar empresas como buenas o malas, defensivas o arriesgadas, growth o value, etc. Dependiendo de cómo las cataloguemos mentalmente, ignorando la evidencia de que las cosas no son como parecen o que sí lo eran, pero han ocurrido cosas (nueva información) que ha hecho que la situación cambie.

El comportamiento de un activo financiero tiene poco que ver con la opinión que tengamos de él y mucho con otras cosas que es necesario estudiar.

En relación con esto, cabe recordar también el Efecto Dotación (Endowment Bias), que ocurre cuando atribuimos más valor o nos encariñamos con las cosas por el mero hecho de poseerlas.

 

En mis próximos artículos del blog haré un descanso de esta serie. Pero queda cuerda para rato, así que no os preocupéis a quienes os interesa. 

En todo caso, es un buen momento para leer vuestros comentarios, apreciaciones o inquietudes sobre este tema, saber si Homer os domina o si aún no habéis conocido a Spock. Me encantaría que compartieseis vuestras apreciaciones. Todos hemos vivido buenos y malos momentos en los mercados financieros, compartirlos puede ser una buen experiencia. Aunque ya sé que muchas veces en RANKIA, y especialmente en este blog, sois muy tímidos comentando, ¡espero que os animéis!

 

 

Tomás García-Purriños, CAIA

@tomasgarcia_p

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Las opiniones, consejos, ideas, etc que leas en este blog, son sólo opiniones. En concreto las opiniones personales de Javier y de Tomás, no las de ninguna entidad.

Ningún post de este blog tiene en cuenta tus circunstancias personales y nada en este blog puede ni debe considerarse como asesoramiento de ningún tipo.Tampoco deberías considerarlo como una oferta o invitación de compra o de venta de ningún instrumento financiero. Invertir en los mercados no es un juego. Cada día se gana y se pierde mucho dinero y son tantos los factores que pueden influir las valoraciones que es imposible predecir sus movimientos con seguridad.

Podríamos tener exposición ya sea personal o a través de alguno de los productos que gestionamos en las entidades para las que trabajamos, en alguno de los activos que comentamos en el blog.

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  1. #1
    18/04/19 14:22

    Soy estudiante de Psicología y me parece muy interesante que hagas este tipo de post, relacionando la Psicología a la bolsa!


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