No, no, ya lo avanzo, por si os queréis ahorrar la lectura, no tengo ni idea, me limitaré a algunas reflexiones en voz alta, que me llevan a pensar en dicha posibilidad.
A finales de 2006, recuerdo al menos dos hechos que mas de uno del negocio del ladrillo los tuvo muy en cuenta, se trataba de la venta de las divisiones inmobiliarias, como mínimo de un par de bancos. Antes de desarrollar esto, creo conveniente indicar que en 2006 los bancos no tenían las divisiones inmobiliarias en la forma que son ahora, en este momento sus inmuebles son unos que no quisieran tener, y sus activos producto exclusivamente de adjudicaciones por impagos de créditos y préstamos. No, entonces algunos bancos tenían filiales dedicadas al negocio inmobiliario, como un promotor cualquiera., otro operador del mercado que en ocasiones hacia la competencia a clientes del banco que se dedicaban al mismo negocio. Bien, pues mas o menos a finales de 2006, Banc Sabadell vendió su negocio inmobiliario concentrado en una sociedad llamada “Landscape” a Astroc, una empresa cuyo accionista de referencia en aquel momento era el Sr. Enrique Bañuelos. También Banesto vendió su filial Urbis a Reyal, para convertirse en Reyal Urbis., supongo que no fueron los únicos casos bancarios, y hubo otros que sin ser del negocio bancario, vendieron también sus sociedades inmobiliarias, como el caso de D. Manuel Jové (Fadesa) que vendió su negocio a Martinsa, cuyo accionista de referencia era el Sr. Fernando Martín (que también fue presidente del Real Madrid), no obstante esto ya fue a finales de 2007
Algunos que estaban en el negocio, tomaron nota y empezaron a creer que el recorrido del asunto del ladrillo, podría estar acabándose, como al final quedó confirmado. Ciertamente los que vendieron a finales de 2006, e incluso en 2007, perdieron una parte del negocio que podrían haber conseguido si lo hubieran conservado hasta principios de 2008, si, es un hecho que no vendieron en la punta máxima, sin embargo cualquier empresario experimentado o incluso inversores, saben que es prácticamente imposible comprar en el punto mas bajo y vender en el mas alto, con lo cual la mejor estrategia es siempre el intento de acercarse a ello, pero que tu comprador tenga o espere un cierto recorrido, si no dejas ninguna posibilidad al comprador, lo que va a ocurrir es de Perogrullo, no tendrás comprador, no encontraremos a nadie que compre algo que está claro que no va a suponer negocio alguno.
Los que tomaron “esta nota”, y actuaron en consecuencia fueron unos afortunados, y los promotores que ralentizaron la iniciación de nuevas edificaciones a partir de 2006-2007, tal vez estén algo “pillados” en algunas unidades que no consiguieron vender, pero muchos se habrían salvado de la ruina, que ha llegado a los muchos que no entendieron que el recorrido terminaba.
Bien, ahora podría estar ocurriendo exactamente lo contrario, pero de otra forma, empezamos a ver noticias de fondos de inversión interesados en comprar importantes paquetes inmobiliarios, muchos propiedad de bancos, comprar importantes paquetes de acciones o participaciones en las actuales inmobiliarias de los bancos, si, comprar, ahora bien a precios bajos, y es de suponer que solo fincas de máxima calidad en cuanto a ubicación, dudo que les interesen “fincas en medio de ninguna parte” o “edificaciones a mitad del recorrido para llegar a alguna parte” …. Para ser mas claros, supongo que interesan fincas en l’Eixample de Barcelona, en la zona alta, en buenas zonas de grandes ciudades, segundas residencias en primera línea de mar, en zonas de rentas medias-altas de Madrid, etc. etc…, dudo que les interesen, al menos por el momento, complejos tipo Seseña, Valdeluz…
La reflexión que me hago es muy simple, si todavía queda recorrido a la baja, porque fondos de inversión se interesen por tomar participaciones en sociedades inmobiliarias de algunos bancos, o directamente adquirir paquetes de inmuebles , no va a ser porque esperen que los precios seguirán bajando indefinidamente, supongo que entienden que el recorrido a la baja está terminado, y creen que tal vez si hay un poco mas de recorrido, pero al mismo tiempo si esperan demasiado podrían quedar pillados en un repunte de su valor.
¿Entonces creo que el valor del “tocho” va a subir en poco? No, en absoluto, me temo que los tiempos de que “la vivienda siempre sube” tardarán décadas en volver, ahora bien un estancamiento del valor y unos incrementos de precios mas o menos cercanos al IPC, en algún momento llegarán.
Otro dato que puede motivar el interés en adquirir paquetes “de ladrillos” a las entidades financieras, es que éstas parece que poco a poco van superando la crisis, están consiguiendo sanear sus balances, prestar a precios mas altos que antes, y que el rendimiento bruto, contenga el precio del riesgo de impago, cubrir las dotaciones de morosidad con el propio negocio recurrente, y una menor necesidad de vender sus activos a precio de saldo, porque si sus beneficios anuales empiezan a guardar una cierta proporción con su patrimonio neto (capital mas reservas, etc.), cosa que no ocurría en 2012, ni en 2011, y puede que tampoco en 2010, y la necesidad mengua, dejarán de estar dispuestos a vender a cualquier precio para obtener liquidez.
En fin, no soy ninguna autoridad ni el “ladrillo”, ni posiblemente en nada, sin embargo a veces uno observa datos, que “atando cabos”, provocan este tipo de reflexiones personales.