En marzo de 2009, los mercados financieros estaban en caída libre y toco volver a recuperarlos. Inyecciones masivas de dólares a bajo precio tanto desde USA como desde Europa. Una gran parte de la liquidez acabó en los mercados de commodities, de tal forma que asistimos a un rally en las materias primas. Por otra parte, otra gran parte acabó en un proceso que se ha venido en llamar Carry Trade.
Este proceso básicamente consiste en endeudarse en dólares a precio bajo e invertir en los mercados financieros de Europa. Por tanto tiene sentido que a lo largo de todo este período existiese una correlación positiva entre los mercados de commodities, el euro y los mercados financieros.
Las inyecciones de dólares, generan una caída del dólar, pero a su vez la subida de los mercados donde dichos dólares acaban. No es difícil ver la correlación.
Tenemos ciertas teorías por ahí circulando conforme a las que el IBEX anticipa lo que ocurre en Wall Street, y quizás pueda tener sentido si nos fijamos en algunos otros detalles.
Por supuesto, el más evidente es que la situación del IBEX ha tenido más que ver con los movimientos en USA que con la situación Española. Este detalle se explica por la internacionalización de las empresas del IBEX, pero sin embargo, esta explicación no tiene demasiado sentido, debido a que si bien es cierto, que las grandes empresas generan un volumen de negocio relevante en el exterior, lo cierto es que Estados Unidos no es un mercado de relevancia aún. En este sentido una recuperación en USA puede ayudar a las empresas que estén en ese mercado, pero desde luego recordemos que incrementar un 10% la facturación en un país que represente el 10% de nuestra facturación supone incrementar un 1% la facturación de la empresa, a la vez que bajar un 10% en donde tenemos el 90% supone caer un 9 la facturación.
Por tanto no parece demasiado lógico que el IBEX reaccione más a las variables USA que a las Españolas. Por supuesto se explica mejor por la realidad de la liquidez en Estados Unidos.
Pero es que por otra parte debemos recordar que España es un país que podemos llamar el pequeño de los grandes o el grande de los pequeños. En este sentido el IBEX tiene las ventajas de un país dentro de la Eurozona y desde luego un tamaño muy reducido. En este sentido Portugal y Grecia son países que tienen las mismas características.
Por tanto, de admitir la existencia del Carry Trade, o lo que es lo mismo que desde USA la banca de inversión ha usado este mecanismo para especular, nos encontraríamos con que el rally bursátil del IBEX que ha superado las revalorizaciones del resto de mercados europeos, ha sido fruto del fenómeno señalado.
Dicho de otra forma, nuestras empresas han sido exactamente lo mismo que Petróleo, y desde luego ha sido un rally totalmente especulativo. Desde luego esto es completamente coherente con el inicio del rally en marzo, ya que en dicha fecha las medidas que se han tomado han sido desde luego principalmente en USA.
El caso es que en resumen, el proceso de subida, ha consistido en un procedimiento originado en la banca de inversión USA apoyada en la liquidez barata de Estados Unidos, la relajación del mark to market y desde luego muchos apoyos que podemos llamar anímicos, (que si brotes verdes, y demás).
Por supuesto el sistema se mantiene mientras entra nuevo dinero en los mercados, por el lado de las ventas de los productos finales a los consumidores en los mercados de commodities y por la misma razón en el caso de las acciones, que no son más que una representación de los beneficios, que no dejan de ser los precios. Por supuesto, cuando los precios suben más que los ingresos de la gente, el proceso genera endeudamiento, en este último caso vía sector privado.
El problema está cuando al final los beneficios o el consumo caen, de tal forma que todo se derrumba. En ese momento, los gobiernos inyectan al sistema financiero el dinero suficiente para que puedan seguir una temporada, pero este dinero, que no procede del sistema económico, (al menos directamente), significa deuda pública. Hasta que al final el sistema comienza a hacer agua.
De repente cuando en noviembre de 2009, los mercados llegaron a la situación anterior a Lehman, no se lograron batir esas marcas. El problema es que el sistema depende de la subida perpetua y en el momento en que se retiran las medidas de liquidez, nos encontramos con un problema. El sector financiero está totalmente desconectado del sistema económico y en lugar de financiar la actividad, está eliminando recursos.
En ese momento, está claro que la caída es inminente, y en consecuencia, todos los mercados que se han beneficiado de las operaciones especulativas de Carry Trade, al final son los primeros en sufrir las caídas. Desde luego, en estos momentos, surge la nueva oportunidad de especulación, de tal forma que esta se traslada a los países. Por supuesto, tal y como en las subprime, donde caen primero aquellos títulos basados en las hipotecas de los más desfavorecidos, la realidad es que esta especulación se ceba en los mercados de las economías más débiles.
Debemos entender que el proceso de Carry Trade, tiene unos efectos sobre el tipo de cambio, a la vez que se ve influido por este.
Si se espera que el euro se va a revalorizar, el proceso de carry trade, se ve favorecido. El proceso es sencillo. Un inversor se endeuda en dólares, invierte en un activo financiero de la zona euro, obteniendo beneficio si el mercado financiero euro se revaloriza y desde luego si el euro se revaloriza. Imaginemos que alguien se endeuda por 120 dólares al 0%, ese dinero se invierte en acciones de Santander a 4, (marzo de 2008); como el euro estaba a 1,20, es fácil entender que se pueden comprar 25 acciones de Santander. Si la acción de Santander sube a 8 euros por acción, y el euro sube a 1,60; la realidad es que la inversión vale 200 euros, que en el mismo tiempo suponen 320 dólares.
Como podemos ver, el proceso es muy rentable, siempre que se de una serie de condiciones.
La primera es que haya liquidez suficiente en dólares, para inyectar dinero para montar las burbujas. Por supuesto, lo curioso es que la liquidez en dólares mediante este proceso se traduce en burbujas en los mercados europeos. De esta forma, la liquidez y los mercados europeos, dependen de las condiciones financieras de Wall Street y no de las condiciones en Europa.
Por supuesto, la segunda condición es que se espere una revalorización del euro. Como podemos ver, las caídas en la moneda frenan el proceso, al provocar una pérdida de tipo de cambio. Por la misma razón la realidad es que si esperamos una depreciación del euro, el enfoque cambia y se cierran las operaciones en euros a toda velocidad, de forma que el euro comienza a ceder.
Si tenemos claro esto, tendremos claro que para que esto funcione, nos encontramos que necesitamos mucha liquidez en dólares, pero a su vez que la liquidez en euros, sea la mínima posible, de tal forma que entendemos porque el BCE ha sido tan reticente a la hora de bajar los tipos, (las bajadas hacen bajar el tipo de cambio).
Y entendiendo este proceso, nos encontramos con la explicación a porque el IBEX es un indicador adelantado de la evolución de Wall Street. Sube cuando existe liquidez en Wall Street, y por supuesto, los beneficios del área dólar vienen derivados de las inversiones en los mercados financieros.
Si hacemos caso a este razonamiento, imaginemos que de repente los mercados financieros europeos no pueden seguir subiendo. ¿Qué significará?.
¿Caídas del euro derivadas de deshacer posiciones?.
¿Salidas de fondos de la UE?.
¿Necesidad de reformas para incentivar las inversiones en las cotizadas europeas?.
¿Llamadas de Obama a los países europeos, presionando para determinadas reformas?.
¿intervenciones de los bancos centrales para salvar los bancos europeos?.
En esta serie de post voy a intentar explicar que es lo que está pasando actualmente con el derrumbe de los sistemas financieros, pero lo que está claro es que si este proceso ha servido para salvar la banca de inversión, ¿Qué ocurrirá cuando este proceso se haya revertido?.