Acceder

El curso online de subastas que estabas esperando

   

 

En estos días en los que todos estamos alucinando con los novatos kamikazes que nos estamos encontrando en algunas subastas, voy a compartir dos ejemplos aterradores, uno de ahora mismo y el otro de septiembre.

 

Cómo lesionarse entrenando subastas

El primero es el de Toni, un avezado inversor madrileño, con más cojones que el caballo de Espartero y menos sentido del peligro que Uli Emanuele. A este joven, tras unas sesiones maratonianas de lectura de este blog y del de Subastanomics tras las que se sintió fuerte y capacitado para comenzar a invertir, no se le ocurrió otra cosa que loguearse en el Portal de Subastas del B.O.E. y hacer algunas pujas de prueba en alguna subasta en la que estuviera seguro de que no corría el riesgo de adjudicarse nada.

Así que ni corto ni perezoso, buscó entre las subastas de Madrid la de algún bien que por ser muy caro no tuviera posibilidades de adjudicárselo e hizo una puja ridícula que no cubría ni una mínima parte de la deuda.

Con tan mala suerte que al procurador se le pasó subírsela y al ser la única puja de la subasta el novatillo se cobró la pieza.

O eso creyó él, al principio. Porque cuando contrató una de mis consultorías tras el verano estaba exultante de felicidad. Hasta que le eché un jarro de agua fría. Primero por la mala pata de ir a hacer el experimento en una subasta del juzgado número 31. Y segundo porque tras una simple llamada al procurador constaté lo que ya sabía, que el banco tenía la intención de mejorar la postura a menos que lo hiciera el demandado.

Es decir, que no había comprado nada.

O sea, que ya le he dicho a Toni que podrá considerarse afortunado si recupera durante el año 2017 el pastón que ingresó en concepto de depósito.

Me ha prometido que su próximo experimento lo hará con gaseosa.

 

Tasando a ojo de buen cubero

El segundo ejemplo de novatos sin fronteras es el de otro avezado inversor que me contactó para intentar colocarme la subasta que acababa de adjudicarse.

A ver, amigos, es cierto que escucho ofertas y que me decido en menos de 24 horas, pero resulta que también soy un oportunista, un “cash buyer house”, que o compra a precios de derribo o prefiere irse a escalar en vez de andar perdiendo el tiempo.

Además, en el 95 por ciento de las ocasiones no tardo 24 horas en decidirme, sino un minuto, el que tardo en leer la oferta y responder que no.

Y así se lo dije a Alejandro cuando me escribió para tantearme.

¿Y qué me respondió?

Pues que me lo podría ofrecer a un precio baratísimo porque se lo había adjudicado a un precio increíble.

Y me dijo el precio.

Y caso me muero de la risa.

Alejandro había comprado solo un poquito más barato del valor real. En un edificio en el que no me extrañaría nada que hubiera alguna familia gitana, algo que destruye el valor del ladrillo hasta mínimos inimaginables para cualquiera que no se dedique a este negocio.

De ser así, de confirmarse la existencia de gitanos, Alejandro va a perder por lo menos veinticinco mil euros.

Y no solo eso, sino que cuando le comenté el problema de los plazos judiciales, al pobre casi le da un patatús. Ni se imaginaba lo que va a tardar en conseguir las llaves y en estar en disposición de poner a la venta esa bicoca con la que creía que iba a redondear los ingresos del año.

Y es que en subastas se pueden hacer muy buenos negocios, pero solo si tienes los conocimientos mínimos. Y el problema que actualmente tenemos todos los inversores profesionales es que la inmensa mayoría de los nuevos postores se cree que porque ahora sea más sencillo acceder a las subastas, eso significa que ya no hay riesgos y que es tan fácil como invertir en fondos de inversión.

Y no es cierto.

 

Mi solución: el curso de subastas

Y el caso es que esta gente está entrando en el negocio de las subastas como elefante en cacharrería y mientras haya locos así, los oportunistas que solo compramos a buenos precios nos podemos ir olvidando de volver a comprar hasta que todos estos novatos se den la hostia y entren en razón.

Y mi solución a este problema ha sido la siguiente:

 

He desarrollado el primer curso online

para aprender a invertir en subastas

 

Todavía no estoy listo para comercializarlo, pero será pronto y NO habrá plazas ilimitadas ni tampoco estará muchos días a la venta.

Por lo que si estás interesado en que te vaya informando y quieres estar seguro de que recibes un aviso cuando comience el plazo para matricularse, no lo dudes, apúntate a la lista y serás el primero en recibir toda la info.

 

--------->>>>>>>   ENVÍAME MÁS INFORMACIÓN DEL CURSO

 

¿Y por qué se me ha ocurrido desarrollar un curso de subastas?  

Pues un poco por lo que acabo de comentar más arriba y otro poco porque hace unos meses tuve una pequeña discusión con un cliente llamado Francisco que me intentaba regatear mis honorarios del 6% argumentando que al fin y al cabo tampoco me había matado a trabajar y que lo que yo hacía lo podría hacer cualquiera.

Y el caso es que eso SÍ es cierto.

Cualquiera con los conocimientos mínimos imprescindibles y con sentido común puede hacer muy buenas inversiones en las subastas. Y es cierto que el trabajo tampoco es para matarse a menos que seas un avaricioso que lo quieras todo.

Por eso le dije OK, voy a hacer un curso de subastas y te lo voy a vender, y a partir de ahora el trabajo lo harás tú.

 

¿Y cuánto va a valer el curso?

Eso todavía no está definido, pero NO va a ser barato.

Un curso que es susceptible de cambiarte la vida de arriba abajo y de hacerte desarrollar unas habilidades alucinantes que cualquiera envidiaría no puede ser barato.

Además, ya sabéis que soy un admirador del darwinismo. Quien pueda pagarlo que lo pague y el resto que siga sufriendo a fin de mes.

El cualquier caso sería un error considerar la matrícula de este curso como un gasto, cuando en realidad es una inversión.

 

Y última pregunta (por ahora), ¿en qué va a consistir el curso?

Va a ser como si el alumno me hubiera acompañado a todas partes durante el último año y medio. Va a haber investigado las subastas junto a mi, leerá y analizará los edictos de subasta conmigo, interpretará docenas de certificaciones de cargas y vendrá conmigo a visitar los pisos subastados, estando a mi lado mientras interrogo al conserje, a los vecinos y al propio ejecutado.

Después de las subastas también me acompañará a visitar a los ex propietarios y okupas y será un testigo privilegiado de todas las conversaciones y negociaciones que yo lleve a cabo para conseguir la posesión.

Y, cómo no, también me verá saltándome la Ley y okupando ilegalmente algunas viviendas.

Todo esto gracias a que llevo un año y medio grabándolo todo.

Ah y entre una cosa y las otras, me tendrá a su lado dándole la brasa con toda la teoría necesaria para moverse como pez en el agua en el negocio inmobiliario. Hay más de 40 videos de Tristán el Garganta Profunda largando sin descanso la teoría que debes conocer si quieres triunfar en las subastas. Algo así como si mientras vamos en coche de piso en piso yo fuera hablando sin parar.

¿Algo más?

Sí, que te apuntes a la lista de espera del curso y ahí te informarán de todo lo necesario y, sobre todo, te asegurarás de que no se te pase el periodo de venta, que va a ser solo de unos días.

 

----->>>>>   Me apunto

 

 

121
¿Te ha gustado mi artículo?
Si quieres saber más y estar al día de mis reflexiones, suscríbete a mi blog y sé el primero en recibir las nuevas publicaciones en tu correo electrónico
  1. en respuesta a mfmelo
    -
    #126
    04/04/17 13:11

    Hola mfmelo, yo he comprado, reformado y vendido mucho....ahora no tengo casi cash, y he trabajado muchos años con inmobiliarias de todo tipo y aunque cada vez se modernizan más siguen haciendo cada cosa que alucino.

    siento curiosidad por esa inmo tan profesional que comentas, podrias darme el nombre? si es de las franquicias de turno...remax, look&find...la oficina exacta ya que cada una trabaja a su manera pero nunca se sabe y me podría interesar ver como trabaja la que te vio tu vivienda

  2. en respuesta a tonigs
    -
    #125
    12/12/16 09:06

    Tonigs, aquí también son públicos pero mediante convenio especial y gran cartera. Eso sí tratando información que debiera ser pública por estar en un registro PUBLICO.
    Esto es lo que diferencia los mercados libres (USA) a los mercados opacos (españistan). No es que admire el modelo social americano pero comparado con el nuestro, y lo poco que conozco, me parece una bendición para los norteamericanos.
    Por cierto, tonigs, podrías poner la url de esa información que comentas.

  3. en respuesta a Josito60
    -
    #124
    12/12/16 08:47

    En Estados Unidos estos datos que tu dices son 100% públicos

  4. en respuesta a Juan1980
    -
    #122
    12/12/16 07:07

    Comparto todo tu argumento, desde la A a la Z, y ésto que es un mal común en la mayoría de las actividades genera una desconfianza enorme en cualquier relación económica de nuestra sociedad. El problema con los pisos es que estos son un bien de primera necesidad para el ser humano, y con ello no se debiera jugar.
    Mira una sencilla solución para que los precios de los pisos fuesen más transparentes es que la información de las transacciones que disponen los registros PUBLICOS de la propiedad se informasen en el boe.es mensualmente de todas las transacciones lugar, m2 y precio realizadas en ese mes. Con esta información oficial las personas podrían determinan según sus conclusiones el precio de la transacción.
    Además, el agente inmobiliario profesional y decente puede aportar mucho más que con el actual modelo de negocio, que como bien dices está montado para desplumar al despistado.
    Por cierto, los datos que comento de los registros de la propiedad, hoy en día, ya se venden y a buen precio.
    En definitiva, un modelo económico decente también es posible alrededor del oscuro mundo inmobiliario.

  5. en respuesta a Josito60
    -
    Top 10
    #121
    11/12/16 21:58

    Esa sería la forma lógica en que debería actuar una inmobiliaria que quisiera ofrecer valor añadido. Sin embargo, la realidad es que la mayoría de agentes inmobiliarios hinchan bastante (en algunos casos muchísimo) los precios y utilizan todo tipo de trucos y técnicas de venta para sacar más comisión. Esto también es resultado de compradores inexpertos, muy mal informados y que no saben negociar, ni saben lo que vale una propiedad en una zona determinada.

    Un buen agente inmobiliario, al margen de lo bonito o no que presente los datos, si conoce bien una zona, sabe perfectamente a qué precio puede vender un inmueble, incluso te podría decir el precio de mercado (no un precio regalado, sino un precio ajustado al momento de mercado) en que ese inmueble se puede vender en el mismo día, en un solo día.

    El problema es que los compradores desconfían. Si un comprador no conoce ni medianamente bien una zona se puede obstinar en negociar a la baja precios que son el precio mínimo de la zona más la comisión mínima. Como reacción a esto, muchos agentes ganan pasta porque de vez en cuando pegan un gran sablazo a alguien, hinchando mucho las comisiones. Porque ven que siendo honestos tampoco venden más! :-)


Nueva Sección
Ventas Desesperadas