"Distribuya sus créditos en lugar de concentrarlos en unas pocas manos. Los créditos elevados concedidos a una sociedad o individuos únicos, aunque en ocasiones pueden ser lícitos y necesarios, son generalmente poco juiciosos y frecuentemente inseguros. Los acreedores importantes pueden tener posibilidad de controlar el Banco: y si se produce esta relación entre un Banco y su cliente, no es difícil saber quien sufrirá finalmente las consecuencias. Cada dólar que una Banco presta por encima de su capital y reservas, lo debe, y sus gestores tiene por consiguiente la obligación más estricta hacia sus acreedores, así como a sus accionistas, de mantener sus lineas de descuento permanentemente controladas."
"Trate a sus clientes con desprendimiento,no olvidando nunca que un Banco prospera si sus clientes prosperan, pero nunca les permita que le dicten su política."
"Si duda de la conveniencia de un descuento, dele al Banco el beneficio de la duda y no lo admita: no descuente nunca si duda de su conveniencia. Si tiene razones para desconfiar de la integridad de un cliente, ciérrele su cuenta. No trate nunca con un bribón en la creencia de que Vd. puede impedir que le engañe. El riesgo en este caso es mayor que los beneficios."
"Pague a sus empleados salarios que les permitan vivir con holgura y respetabilidad sin tener que robar: y pídales la totalidad de su tiempo. Si un empleado vive por encima de sus ingresos, despídalo. Incluso si su exceso de gastos se puede explicar en forma consistente con su integridad, aún así despídalo. la extravagancia, aunque no sea un crimen, conduce inadvertidamente al crimen. No puede ser empleado de confianza de un Banco quien gasta más de lo que gana."
"El capital de un Banco debe ser una realidad, no una ficción. Y debe estar en las manos de quienes tienen dinero que prestar, y no de los necesitados de él. El interventor tratará de evitar, por todos los medios a su alcance, la creación de un capital ficticio por parte de los Bancos nacionales,mediante el uso de su propia circulación fiduciaria, o de cualesquiera otros medios artificiales; y en sus esfuerzos para conseguirlo confía poder contar con la cooperación de todos los Bancos bien dirigidos."
"Persiga un negocio bancario directo, honesto y legítimo. No deje que la perspectiva de grandes beneficios le tiente a hacer nada que no este permitido por la Ley de Moneda Nacional. Los esplendidos financieros, en el mundo de la Banca, son generalmente o farsantes o truhanes."