En España, uno de los grandes dramas es el retraso en los pagos. Independientemente de las leyes, independientemente de lo pactado o convenido, aquí todo pichichi paga a 30, 60, 90 días como poco. Y si tenemos en cuenta que eso es fecha factura, la realidad respecto a la entrega física de bienes y servicios es mucho peor. Y al igual que ocurre con los concursos de acreedores, el mal se extiende como una epidemia virica. La financiación del proveedor es una enfermedad que se transmite por toda la cadena de productores y distribuidores, con mayor o menor intensidad, en función de la fortaleza y posición de la empresa. Veamos como lo describe.
Supongamos un concesionario de coches que vende automoviles de producción nacional y cuyos inputs estén todos fabricados en este país, irreal pero es un ejemplo teórico. Supongamos que todas las empresas de la cadena de valor tengan
el fondo de maniobra adecuado. Supongamos que al del concesionario le apetezca tener mas dinero en caja y retrase uno de los pagos. Para que el fabricante pueda mantener su nivel de liquidez se vera obligado a retrasar los pagos a sus proveedores y así sucesivamente. Sin embargo, hay ciertos pagos ineludibles (nominas, seguridad social, hacienda)... con lo que al final tendrá que tirar de su linea de crédito. Y esto implica que cuanto mas complicada es la situación crediticia mas necesidad de crédito adicional se produce multiplicando el efecto de credit crunch y el parón economico.
¿Qué propone Alucinado?
toda empresa que compre a otra un bien o un servicio debe pagar al contado o bien garantizar dicho pago con un mecanismo de escrow que no seria mas que la entidad financiera bloquease dicha cantidad bien de su tesoreria bien de su linea de credito y fuese legalmente efectiva a vencimiento en cualquier circunstancia. En caso de que el producto o servicio fuese defectuoso el comprador tendria que probarlo y se someteria a arbitraje, proceso que nunca podria superar un mes.
En definitiva, o pagas en dinero, al instante, o pagas mediante un sistema de escrow, en ultima instancia algo similar al conforming+crédito documentario (el Banco te bloquea/coge un dinero de la cuenta hoy para pagar a ese proveedor dentro de 90 días, siempre y cuando se cumplan las especificaciones pactadas. De no tener dinero, puedes recurrir a habilitar una linea de crédito con ese Banco. Digamos que se financie por partidas presupuestadas). Las ventajas, según Alucinado, son evidentes: riesgo mínimo, cada uno asume (en principio) los costes de su financiación, obliga a la empresa a retratarse sistemáticamente ante los Bancos si no tiene dinero, se controla el tema de los plazos máximos por ley así como las prácticas dilatorias, etc...
Al margen de la viabilidad legal de su aplicación, yo tengo mis dudas. Expongo algunas a continuación:
1. Si el proveedor no asume riesgos debe reducir sus margenes. O dicho de otro modo, aquellas empresas que son capaces de analizar de mejor modo a sus clientes, que saben a quien vender y cómo, y a quien no vender, perderían esa ventaja competitiva. Conozco más de una firma que, allás por el 92/93, en plena crisis, cimento su crecimiento vendiendo a quien otros no vendían,haciendo un seguimiento de riesgos estricto y una aplicación de política de margenes diferenciada que ya quisiera un Banco. Este sistema igualaría a todos. No se hasta que punto es justo. No se hasta que punto es eficiente al eliminar estas habilidades de la gestión empresarial. Me temo, que de aplicarse esta normativa imperativamente, existiría un mercado B, gris o negro, donde operarían este tipo de empresas.
2. No acabo de entender como se garantizan así los pagos a Hacienda, a las nóminas o la Seguridad Social. Esos pagos son exigibles a la vista, según se produzca la liquidación (quizás me estoy perdiendo algo). De hecho, esos gastos corrientes son los que, en buena lógica financiera, han de financiarse con fondos propios. No se, ¿alguna idea de por donde van los tiros?
3.Este sistema desplaza todo el riesgo hacia los Bancos. Ingentes volúmenes que hoy por hoy están fuera de la financiación bancaria pasarían a la misma. No se si esta capacitado para resistirlo. Y es que, además, el papel de los Bancos cambiaría. Digamos que necesitarían expertos en análisis de documentación mercantil en cada oficina, en cada unidad de negocio, etc. Enlazo con el punto n.1, muchas veces el que mejor conoce a su cliente es su proveedor. A veces en exceso.
4. Por cierto, que en el mundo de los créditos documentarios hay auténticos figuras especialistas en levantar salvedades para no pagarlos. Ojo, que quizás luego cobrar esa cantidad aplazada no es tan fácil, recordando además que lo del arbitraje no es una panacea ante el caos judicial que nos rodea. Es posible que sea más rápido, pero también es más costoso (si, ya se que el tiempo es dinero, sólo lo matizo): Pero es que además los laudos deben ser ejecutados, y para ello se requiere el acceso a la Administración de Justicia. Y por cierto, aunque te digan que algo no es recurrible, ojo porque puede acabar siéndolo (no quiero extenderme).
5. Me parece fantástico que las empresas tengan que retratarse permanentemente ante los Bancos, que tengan que suministrar información exhaustiva. El problema es que veo que muchas no son capaces de suministrar información de calidad. Ni ellos ni sus gestores ni sus asesores. Es frecuente encontrarse con formas que, de buena fe, cuando descuentan un efecto, lo dan de baja contablemente como si fuese un cobro en firme, sin seguir reflejando en sus balances ese riesgo latente hasta que el Banco nos diga que no hay problema. O que decir de aquellos que no contabilizan adecuadamente las amortizaciones o las provisiones. No se, incluso cuando lo hacen correctamente, si la firma es pequeña, la información tiene más de contable o de fiscal que de naturaleza financiera.
6. Habría que definir que es contado, que es entrega. En ocasiones está claro. En otras muchos no tanto. Y que decir de los supuestos en los que, aun no habiendo entregado el bien, los costes son enormes en caso de incumplimiento del primer pago. Estoy penando en el proveedor que cree haber hecho la venta de su vida. Pongamos toneladas y toneladas de producto perecedero a un precio coj..., y cuando va a entregarlo, después de haberlo comprado según el sistema antes descrito y a cobrarlo del mismo modo, se encuentra con que el otro ha cambiado de idea. Los que trabajen con grandes superficies sabrán de lo que hablo. Si, no he entregado el bien, pero a ver a quien y cómo se lo coloco ahora.
La idea me parece buena, pero creo que difícil de llevar a cabo. Lo que si que creo que es una muestra más de la necesidad que tienen los empresarios de que vender, cobrar y obtener beneficios son conceptos distintos. Y que quizás deban ser conscientes de los riesgos que asuman y que gestionan, dejando pasar bocados intragables.
Por cierto, me ha gustado la referencia que hace al modelo de garantía a los compradores sobre plano. No es un mal modelo, pero ya vimos que tenían sus agujeros y que protegen lo que protegen. Al final, en la vida, el riesgo 0 no existe.
En todo caso, un blog muy recomendable.