Nota previa:
Los bancos centrales no cesan en su empeño de explicarnos que tratan de evitar las burbujas. Existen algunas críticas hacia el papel de los bancos centrales que nos dicen que algunas medidas pueden crearlas, sin que estos lo vean. Es hora de que entendamos que los bancos centrales están intentando constantemente crearlas como instrumento de política monetaria.
Este post es una reedición de otro publicado con el mismo nombre el 8 de octubre de 2009. Se han corregido algunos fallos de redacción. Sin embargo, los datos, el análisis y las conclusiones se han de entender referidas a 2009.
Las burbujas como Política Monetaria.
Uno de los primeros post de esta etapa trataba sobre unas declaraciones de Greenspan, (expresidentes de la FED y señalado como uno de los culpables de montar la burbuja o serie de burbujas que nos asolan) afirmando que el problema de las burbujas es que son difícilmente detectables.
El enfoque de ese post partía de la presunción de que Greenspan fuese sincero. Esto nos llevaría a que los atrapados en esta burbuja debieron prever lo que el presidente de la FED no lograría detectar. En fin.
Sin embargo, lo cierto es que, en mi opinión, Greenspan no es del todo sincero cuando dice que las burbujas no pueden detectarse (al menos por los bancos centrales o gobiernos que disponen de toda la información y medios para conocer las realidades). No deja de ser una opinión; pero con este fenómeno solo caben dos posibilidades:
- La primera es asumir que realmente los analistas, expertos y, sobre todo, los encargados de velar por el sistema financiero no pueden detectar las burbujas y, mucho menos, luchar contra ellas. Lo cual nos deja en una situación dramática ya que supondría que cualquier decisión que tomemos o tomen será tomada de forma inconsciente. (¿Entramos en un campo de minas asumiendo que no podemos detectarlas?).
- La segunda es asumir que se pueden detectar y que existen porque simplemente interesan.
Yo creo que la primera opción es completamente descartable; es más que evidente que las burbujas son detectables si se dispone de la información adecuada y de primera mano
Asumir que no se han detectado previamente es asumir que los responsables económicos tendrían que ser sorprendentemente estúpidos para no detectar la burbuja punto.com, la inmobiliaria o la de commodities del año anterior. No voy a defender que esto sea imposible, pero la verdad es que chirría y mucho.
Otra de las razones que me lleva a pensar que esto es algo más que sorpresas o cisnes negros es en el innegable hecho de que no parece preocupar a nadie. Está claro que si los bancos centrales no logran detectar burbujas ¿Por qué no dedican todo sus esfuerzos a lograr métodos para detectarlas y combatirlas? Yo creo que no sería coherente que los bancos centrales no pudiesen detectar las burbujas y, en lugar de no dormir ante tamaña carencia, dedicasen todos sus esfuerzos a pedir contenciones salariales y liberalizaciones en mercados de trabajo. Por supuesto la incompetencia puede explicar el fenómeno de que, no sabiendo acerca de lo que es su competencia directa, se dediquen a otras cosas. Pero no parece probable.
Sin descartar, por tanto, la incapacidad de los bancos centrales, queda explorar la otra opción. Las burbujas financieras pueden ser detectadas. A mí me parece la alternativa más plausible porque además se apoya en varios aspectos.
Como ya he explicado en el post sobre la creación de dinero la oferta monetaria está más condicionada por el multiplicador monetario que por la base monetaria. El multiplicador monetario es la cantidad de dinero que crea el sistema financiero a través del crédito, de tal forma que (tal y como ya expliqué en el post de la actividad bancaria) el crédito bancario crece bien porque suben las garantías o bien porque suben los ingresos. En un contexto de rentas disponibles decrecientes y de contenciones masivas de los sueldos, la única forma de expandir el crédito pasaría por la subida del valor de los activos. Por tanto, es curioso observar que las burbujas son condición necesaria para realizar una expansión monetaria.
Dicho de otra forma, sin incrementar los ingresos sólo hay una forma de expandir el crédito: Bajar los tipos de interés (de forma que las cuotas a pagar por los préstamos sean menores y que los agentes superen los scoring) y subir el valor de los activos para que el importe de endeudamiento pueda subir y, en consecuencia, se cree el dinero necesario.
¿Tenían motivos para hacerlo? En un contexto de claro dominio de las políticas monetaristas, donde al ECOFIN (órgano encargado de las políticas fiscales) no lo conoce ni la familia de sus miembros, la única forma de salir del lio de las punto.com o del shock del 2001 o de las famosas recesiones periódicas es usar la política monetaria. Por lo tanto han usado y abusado de la política monetaria para esconder las crisis y tratar de no agotar un modelo de crecimiento.
La política monetaria expansiva fue, por tanto, la tapadera de una situación de la economía real cada vez más desastrosa y de un desastre financiero que fueron los movimientos especulativos de finales de los años 90, (crisis financieras, de materias primas, defaults de países y el punto final con las punto.com).
La siguiente pregunta es ¿los bancos centrales tienen posibilidad de crear burbujas? o de otra forma, nos debemos preguntar si los bancos centrales pueden dirigir el dinero hacía algún sector o activo en particular. Y por eso debemos tener en cuenta varios aspectos
Debemos tener en cuenta los swaps entre bancos centrales, que en definitiva consisten en inyectar coordinadamente monedas de distintas zonas. Por ejemplo, tanto la FED como el BCE están inyectando cantidades ingentes de dólares a lo largo de todo el 2008 (ambos sin límite y sin restricciones), de tal forma que nos encontramos con dos efectos; el primero es la caída del dólar y el segundo es que se inyecta dinero en dólares, que acabará en los mercados denominados en dólares que se derrumbaron en el segundo semestre de 2008 (los mercados de commodities). Es fácil ver el incremento del precio de las commodities y muy fácil relacionarlo con los bancos centrales.
Otro instrumento que tienen los Bancos Centrales es el uso de los colaterales. Cuando los Bancos Centrales inyectan dinero las entidades financieras aportan garantías a cambio. Estás garantías pueden ser titulaciones hipotecarias, títulos de deuda pública, bonos respaldados por préstamos o tarjetas de crédito o incluso acciones. Cada uno de los activos tiene una serie de condiciones de descuento y valoración, modificando los valores aceptados en el rango de colaterales logramos dirigir el destino final de los fondos inyectados. Hubiese sido impensable el boom inmobiliario sin una amplia aceptación de titulaciones hipotecarias por los bancos centrales.
El sistema de los colaterales depende de dos variables: la tasación y el descuento. Por tanto el sistema es muy similar al de las entidades financieras y las hipotecas. Asignan recursos a la economía modificando tasaciones y porcentajes de financiación, de tal forma que si las tasaciones suben y los porcentajes también, es fácil comprobar que se inunda el mercado inmobiliario de tal forma que se monta una burbuja.
Por supuesto, todo ello tiene que venir aderezado con informes, muy poquita transparencia, sentencias sin razonar y, por supuesto, campañas de formación de opinión, apoyando lo que interese al sistema financiero, (tipo la famosa de los brotes verdes, que surge en la misma semana en que actúan coordinadamente la FED, el BCE, el BoE, y el tesoro de USA con una macroinyección acompañada de medidas adicionales como la aprobación de la eliminación del mark to market en sus distintas versiones,…).
Por tanto, mi opinión es que los bancos centrales sí son capaces de detectar burbujas y que son desde luego parte activa en la gestación de ellas, porque son requisito imprescindible para la expansión monetaria y tienen los instrumentos. Y hoy es el mejor ejemplo.
Si esto fuese un juicio, ante el “yo soy inocente porque no sabía nada”, tendríamos que valorar si los bancos centrales tuvieron la oportunidad y el motivo; y después buscar los indicios. Y sinceramente me veo en el papel de Fiscal.
La última pregunta trata sobre los fines de tales desastrosas políticas. ¿Fueron huidas hacia adelante continuas, confiando en que las cosas mejorarían? o bien ¿fueron obras de auténticos sociópatas que deliberadamente esquilmaron a toda una sociedad?. Esta es la diferencia entre concluir que esta política fue una gran manipulación, como defienden los conspiracionistas, o bien fue una gran chapuza (sinceramente es mi opinión); que nadie se engañe, yo hubiese preferido que fuese todo una conspiración. ¡Una conspiración nos necesita trabajando para detraer recursos! en cambio ¡Una gran chapuza nos arrastra a todos sin misericordia!