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Dado que sigo con ciertos problemas para escribir post y dado que hoy en día el único argumento para defender que los mercados financieros van a tener una racha alcista o simplemente que no se vayan a derrumbar, está en aquello de los fundamentales me va a tocar otra reposición. Antes de nada dejar claro que la explicación de los  fundamentales es la forma elegante de decir aquello de que “no se va a dejar caer”.

En realidad esto es lo que subyace detrás de todo análisis.  Se trata de aquello de que las autoridades y bancos centrales van a hacer todo lo necesario para evitar que los sistemas financieros se derrumben. Este argumento es del todo evidente y difícilmente se podrá poner ningún tipo de objeción.

Sin embargo debemos tener en cuenta que lo que está ocurriendo en los mercados financieros se debe básicamente a la interacción de dos fuerzas. Por un lado están aquellas personas que se confían a que las autoridades podrán y sabrán salir de esta situación, o por lo menos que en esta ronda no van a dejar caer a los mercados financieros.

Por otro lado, estamos en una situación en la que todo el mundo es consciente de que cada una de las rondas de ayudas, lo que hacen es empeorar la situación económica, de tal forma que cada vez estamos más cerca del límite a soportar por la economía. En definitiva, que estamos en un proceso que tiene un límite, y por tanto el problema está en conocer este límite y salir de esta rueda a tiempo.

El problema que nos encontramos con los mercados financieros, por tanto, no es otro que la economía, por esto me gustaría reponer el post de “es la economía, estúpido” que decía así:

Estamos en una situación curiosa en la que jamás tanta gente (¡de los listos!), trabajaron e idearon tantas soluciones para solucionar una crisis financiera, y a su vez, existe la sensación de que nadie tiene la menor idea de lo que hay que hacer para solucionar este problema.

Se han tomado toda una serie de medidas para salvar el sector financiero, que hubiesen sido absolutamente impensables hace sólo pocos años; ¿nos imaginaríamos a los bancos centrales y gobiernos inyectando billones (ponga la moneda que quiera) en los mercados?; ¿imaginaríamos a los bancos centrales interviniendo en todo tipo de mercados para que no se caigan?, ¿eliminando las valoraciones de las entidades financieras?, ¿sacando normas para que empresas con fondos propios negativos no quiebren?, ¿limitando los tipos de los depósitos?, ¿aceptando bonos basura como garantías de préstamo y al final comprándolos?. ¿Imaginábamos que todo se iba a desmantelar para salvar al sector financiero?.

Pues con todas las medidas que se han tomado, (y algunas han sido espectaculares) para recuperar los mercados financieros, lo que se ha conseguido es mejoras puntuales, de tal forma que cada vez medidas más costosas, cada vez duran menos.

Y en estos momentos en que el sector financiero vuelve a estar en problemas, tenemos a todo el mundo buscando soluciones financieras. Que si en Estados Unidos se busca ampliar el límite de endeudamiento, que si en Europa tiene que haber un ministro de finanzas, que si el eurobono, que si subidas de tipos, o si bajadas de tipos, que si las reformas (que siempre han de llevar el apellido de “necesarias para el crecimiento”, que si sacar empresas a bolsa… En fin, el caso es que todo ha fallado y ahora tenemos a todo el mundo otra vez tratando de buscar alguna solución financiera a este embrollo.

Lo que no se acaba de entender es que la búsqueda de una solución financiera a este embrollo, simplemente es inútil porque no existe. Por supuesto, esta obviedad no es posible verla, gracias a la primera serie de medidas que se ha tomado, que no es otra que tapar los ojos, las narices y los oídos. ¡y ojo que no estoy hablando de las medidas tomadas en 2007; ni las tomadas en marzo de 2009!. Estoy hablando de un proceso en el que se ha cambiado la forma de pensar en el ámbito económico y el sector financiero ha pasado a ser un fin en sí mismo, en lugar de ser un medio para financiar la actividad económica.

Al final, aunque sólo sea una perogrullada, deberíamos recordar que la propia definición de sistema económico es un conjunto de personas, instituciones y reglas que tratan de convertir una serie de recursos escasos en bienes para su consumo. Y esto es muy importante, porque todo este tinglado, se trata al final de que consigamos organizarnos para convertir recursos en algo que satisfaga nuestras necesidades, a través de algún sistema productivo. Y el sistema financiero no es más que una parte de este sistema.

Pues de alguna forma, de repente se ha construido un delirante esquema de dogmas, en los que en ocasiones se identifica sistema económico con sistema financiero, en otras ocasiones se nos cuenta que el sistema financiero anticipa lo que va a ocurrir en la economía y otras veces se nos cuenta que el sistema financiero no tiene nada que ver con la economía. En medio de la esquizofrenia reinante, es habitual ver a analistas que incluso nos cuentan todas y cada una de las opciones de forma indistinta según la explicación que quieran dar. ¿Quién no ha hablado de que las inyecciones han sido para salvar la economía, (¡error!), para afirmar luego que el rally de 2009 fue debido a que se anticipaba una fuerte recuperación (¡otro error!); para acabar descubriendo que se puede seguir siendo alcista porque al final los mercados financieros no dependen de la economía, (¡error!), que se está desacelerando, (¡más errores!).

Informes primero, políticas monetarias y luego todas y cada una de las reformas que se han pedido, han sido definidas con el único y claro objetivo de salvar al sector financiero, bajo la premisa de que esto no perjudica a la economía real, que simplemente ha desaparecido del imaginario popular.

Esto de empresas produciendo unos bienes para ir a un mercado libre, donde se venden estos productos a personas que madrugan todos los días para ofrecer su trabajo a cambio del dinero suficiente para adquirir estos bienes, ha sido completamente olvidado. Hace años se nos contaban que las políticas monetarias, la especulación, las desregulaciones, las contenciones salariales, el euro y todo lo que al bueno del sector financiero le interesa ¡traería beneficios a la sociedad (lease economía) en el futuro, pero hace tiempo que el discurso ha cambiado por el “no hay otro remedio”.

Pero lo que debemos entender es que existen dos formas de abordar el problema financiero, (y las hubo en la crisis asiática, las hubo en la punto.com, las hubo en las subprime, las hubo en la crisis de las commodities de 2008 y las hay ahora donde tenemos todo junto). O se devolvía al sistema financiero a la realidad económica o se trataba de hinchar el sistema económico, a costa de la realidad económica.

Sistemáticamente se han montado burbujas, que parece que no afectan en nada, y se ha ido construyendo un esquema en el que simplemente la economía está en una situación hostil. Y era necesario, porque la mejor forma de tratar de recuperar de forma rápida el sistema financiero era sacrificando a la economía real. Lo que nadie ha contado es que cargándose la economía real en todo el mundo, las burbujas son cada vez peores y la situación cada vez más insostenibles.

Por lo tanto y descartando las medidas insostenibles, sólo hay una forma, que es recuperar la economía, recuperar los mercados y buscar la forma de que la economía financiera no lo hunda todo.

 

 

 

 

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  1. en respuesta a Berkaloff
    -
    Top 100
    #8
    02/05/12 20:41

    En idioma castellano, solemos ser menos resumidos que en otros idiomas. De hecho, a veces el hecho de escribir más hace que el lector aprecie el tiempo que el escritor ha dedicado.

    Escribir de manera sucinta tiene la ventaja de que se consume menos tiempo leyendo, pero también favorece el exceso de simplificación, o la exposición de conclusiones verdaderas o no, sin su debido respaldo argumental. La escritura sucinta también evita esfuerzo de comprensión de lectura, y empuja al peligro de eliminar el pensamiento crítico, porque todo está demasiado simplificado, reducido a dipolos minimalistas.

    Por supuesto, culturalmente los estándares son distintos en distintos países, de modo que lo que es un texto largo para unos, no lo es para otros.

    Al menos así lo veo yo...

  2. Top 100
    #7
    02/05/12 20:36

    La solución para arreglar el sistema financiero es la misma que la solución frente a un esquema de Ponzi. Darle dinero a alguien que hace un esquema de Ponzi es como lanzar agua a un barril sin fondo.

  3. #6
    26/04/12 12:00

    ¿Quien cree que en este escenario los empresarios se arriesgaran a invertir a crear valor y empleo ? ¿con que créditos ?

    ....con la desconfianza creada por los políticos e instituciones, por no tener un plan de salida claro de la crisis desde 2007 ? ¿realmente conocen la estructura económica del país ? ¿el tejido industrial de pymes? ….el problema clave no es la economía en nuestro país , es la política económica de los políticos, su pésima comunicación y su falta de empatía, su frentismo, y poca capacidad de pactos a nivel nacional con los agentes sociales y el resto de fuerzas políticas…
    ——————-
    Los problemas de “nuestra” democracia…
    Salvador Giner, sociólogo, 1984
    http://www.alcoberro.info/pdf/giner4.pdf

  4. en respuesta a Maroci
    -
    Top 100
    #5
    24/04/12 22:44

    estamos en ello...

    ¡anda que les ha costado enterarse....!

  5. en respuesta a Berkaloff
    -
    Top 100
    #4
    24/04/12 22:44

    gracias por el consejo.

  6. #3
    24/04/12 16:45
  7. #2
    24/04/12 13:24

    a mi me ha parecido todo muy interesante.
    Un slaudo

  8. #1
    Berkaloff
    24/04/12 11:39

    Con mucho respeto. Dí las mismas cosas con menos palabras y te leeremos más.


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